Pasteles de salmón. El aperitivo perfecto para sorprender

Para 4 1.10€/pers. 290kcal/100g

Las recetas de pescado deben de estar siempre presentes en nuestros menús, para llevar una dieta equilibrada y saludable. Escapando de las elaboraciones más clásicas, como puede ser al horno o en fritura, el pescado da mucho más de sí en cocina. Hoy os traigo este plato diferente, que podéis hacer sin complicaciones y que también ayudará a que los más peques de la casa se aficionen a comer pescado.

En esta ocasión me he decantado por el salmón, un pescado muy utilizado, que podéis encontrar en muchos formatos diferentes. Para esta receta lo ideal es utilizar un trozo de lomo, sin espinas, al que solo desecharemos la piel una vez ya cocinado. En este estilo de plato, os recomiendo la hamburguesa de salmón o la hamburguesa de merluza, unas ricas albóndigas de salmón y langostinos o un salmón en papillote con salsa holandesa.

En la técnica culinaria del papillote o papillot, se cocinan los alimentos al vapor y en sus propios jugos. Se encierran los alimentos a cocinar en un paquete hermético y se hacen al vapor, al horno, a la plancha. Así, sin manchar la cocina y de forma rápida y fácil tendremos como resultado un pescado, en este caso, cocinado con toda su esencia y aroma. Aprovechando el calor de la cocción de las patatas, cocinaremos nuestro salmón de una manera súper saludable, utilizando esta técnica de cocina.

Receta pasteles de salmón

Preparación de los pasteles de salmón

1. Pelamos las patatas y las cortamos en cuartos.  En una cazuela, ponemos abundante agua a hervir. Coceremos las patatas unos 20 minutos, hasta que estén tiernas. El tiempo es orientativo, en función del tamaño y dureza de las patatas. Salamos al gusto.
2. Cortamos el salmón en trozos. Lo colocamos sobre papel aluminio, cerrando haciendo un paquetito. Lo que conocemos como “papillote”. Vamos a aprovechar el calor de la cazuela para cocinar al vapor el pescado. Apoyamos un colador grande en la olla donde cocemos las patatas, sobre el nuestro paquete con el salmón. Cocinamos 8/10 minutos.
3. Pasado el tiempo, retiramos y abrimos el papillote. Dejamos atemperar un poco, retiramos la piel del salmón y reservamos.
4. Cocidas las patatas, escurrimos y las pasamos a un bol grande. Las machacamos con un tenedor o similar, también valdría que uséis un pasapuré.
5. Picamos el perejil fresco, bien fino. Desmenuzamos el salmón, comprobando si hay alguna espina perdida o un trozo de piel olvidado.
6. A continuación vamos incorporando el resto de ingredientes: sal y pimienta negra al gusto, perejil, ralladura de limón (al gusto), y finalmente la harina. Mezclamos bien, volviendo a machacar si es preciso, para que quede todo bien integrado.

Damos forma y resultado final

1. Cogemos un poco de puré, le damos forma con las manos, formando nuestros “pasteles” redondos, de unos 2 centímetros de grosor. Repetimos el proceso con el resto del puré. Una vez hechos todos los pasteles de salmón, cubrimos con film transparente, dejándolos al menos 1 hora en la nevera. Así cogen la consistencia necesaria antes de cocinarlos.  
2. En una sartén, con una lámina de aceite de oliva virgen extra, freímos los pasteles de pescado. Vuelta y vuelta, hasta que estén dorados/tostados por ambos lados. Retiramos, dejando escurrir el exceso de aceite sobre papel de cocina absorbente. Y ya estarían listos.

Consejos para unos pasteles de salmón perfectos

• Aquí el salmón es el pescado escogido, pero en esta elaboración un pescado blanco encaja perfectamente: merluza, pescadilla, lubina, dorada, etc. También se le podrían incluir unas colas de langostinos o gambas, bien picaditas. Al mismo tiempo, es posible dadle un toque personal añadiendo un poco de picante, hierbas aromáticas o esa especia que os encanta y se la echáis a todo.
• Si no disponéis de salmón fresco, el ahumado que viene ya envasado y listo para consumir, es también una opción válida. Troceadlo bien para que se integre bien en el puré.
• Un buen acompañamiento para este plato es una ensalada con brotes tiernos de lechuga, acompañando de vuestra vinagreta preferida. Este pastel es un plato contundente, por lo que con una ensalada o algo ligero es suficiente para complementarla.

Hemos trabajado 4 horas y 25 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?

35 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 120 min. para grabar y editar el vídeo, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.

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