Para 4 1.80€/pers. 310kcal/100g
Ingredientes
- 800 g. de muslos de pavo (2 unidades)
- 500 ml. de cerveza rubia
- 50 g. de ciruelas pasas
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- Aceite de oliva virgen extra
- Pimienta negra
- Romero seco
- Sal al gusto
Un guiso o un estofado siempre es bienvenido en la mesa, ya que suele ser un plato reconfortante, lleno de sabor y con una salsa deliciosa para no para de rechupetear en ella. En la mayoría de ellos solemos utilizar algo de vino en su elaboración, pero la cerveza es también un gran valor para la cocina a fuego lento, una técnica más en la cocina y sin prisas. Una cerveza rubia, con poca graduación, es la escogida para preparar unos ricos muslos de pavo guisados.
Para el blog ya había preparado con anterioridad otras carnes blancas, como el guiso de conejo o el pollo a la cerveza, así que esta vez me he decidido por elegir el pavo, una carne que también encaja a la perfección para cocinar con cerveza. La carne de pavo tiene un buen aporte de proteínas biológicas (gracias a su porcentaje de aminoácidos esenciales), lo que la convierte en saludable e incluirla en nuestros menús en casa.
Esta receta de hoy es por tanto económica, fácil de preparar y muy sabrosa, donde usamos una cerveza ligera que le aportará un sabor especial a nuestra salsa y también a la carne, por supuesto. Podéis utilizar la que más os apetezca, pero os recomiendo que tenga poca graduación, si no se nos hará más fuerte el sabor final del plato. Para hacer contraste de sabores, he incluido unas ciruelas pasas o deshidratadas, que le aportarán un toque dulce al plato. La verdad es que es todo un acierto, y lo tendré en cuenta para otros guisos de carne.
Receta muslos de pavo a la cerveza
Preparación paso a paso
- Tendremos la carne atemperada, para asegurarnos una mejor elaboración. Salpimentamos los muslos. En una sartén amplia, vertemos una lámina de aceite y calentamos. Cuando coja temperatura, marcamos los muslos a fuego medio/alto, de modo que queden doraditos por ambos lados. Retiramos y reservamos para más adelante.
- Cortamos la cebolla en juliana, el ajo bien fino y las ciruelas en cuartos. Dejaremos alguna entera para la presentación final del plato.
- En una cazuela alta, vertemos el aceite de freír la carne. Añadimos la cebolla y el ajo, que sofreímos durante un par de minutos a fuego fuerte. Bajamos ahora a fuego medio, y seguimos cocinando 3/4 minutos. Salamos.
- Echamos ahora las ciruelas, colocamos los muslos de pavo, añadimos romero seco al gusto y finalmente vertemos la cerveza.
- Llevamos a ebullición y a continuación ponemos a fuego bajo. Cocinaremos unos 30 minutos, con la cazuela tapada. A mitad de tiempo, damos la vuelta a los muslos y seguimos cocinando.
- Pasado el tiempo, apagamos el fuego y dejamos reposar 5 minutos. Pasamos a una fuente y servimos en la mesa.
Consejos para unos muslos de pavo a la cerveza perfectos
- Buscad unos buenos muslos de pollo, o lo que llamamos “jamoncitos”, de buena calidad. Son piezas grandes, de unos 400/500 gramos cada uno, por lo que da cada uno para 2 personas. Si sois generosos, podéis poner uno por persona, lo que será una muy buena ración.
- Para este guiso os recomiendo una cerveza ligera, de una graduación entre 4-5 grados de alcohol. Una opción lógica sería una cerveza rubias, tipo lager, que es el perfil de la mayoría de cervezas industriales del mercado. Y ya puestos a recomendar, escoged unas cuantas Estrella Galicia, para cocinar y también para el maridaje.
- Igual que otros guisos, este también estará más bueno de un día para otro. Se asientan los sabores y gana la salsa que no veas. Sí que podéis prepararlo de víspera y dejarlo en la cazuela. Al día siguiente, calentamos sin prisas, a fuego bajo, moviendo en vaivén de vez en cuando.
- Este plato podemos acompañarlo casi de cualquier cosa, unas patatas cocidas, asadas o fritas, arroz o incluso pasta. Cualquiera de las opciones es perfecta para disfrutar de este guiso de pavo, tan sabroso y aromático.
Hemos trabajado 2 horas y 40 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?
50 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.
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