Para 6 2.9€/pers. 334kcal/100g
Ingredientes
- 600 g. de judías pintas (frescas, secas o en conserva)
- 8 zanahorias
- 2 cebollas
- 1 pimiento rojo
- 4 dientes de ajo
- 8 patatas medianas
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimenta negra recién molida (al gusto)
- 1 litro y medio aprox. de agua o caldo de carne o verdura
- Butifarras (las que más os gusten): En este caso lleva, butifarra fresca con ajos tiernos, butifarra blanca de huevo con patata, cebolla y trufa, butifarra fresca con setas y butifarra fresca con escalivada
Cómo hacer judías pintas con butifarra.
Hace poco llegó a mi casa un ingrediente no muy habitual en mi dieta, la butifarra. Un producto que me ha sorprendido gratamente por su sabor suave y ese toque picante que deja al final.
No todas las butifarras son iguales: butifarra fresca con ajos tiernos, butifarra blanca de huevo con patata, cebolla y trufa o la butifarra fresca con setas. La que más me gustó la butifarra fresca con escalivada, de todas ellas di buena cuenta en esta receta.
Pensé en tomarlas directamente a la plancha y con un buen trozo de pan, pero se merecían algo más.
Tenía en la nevera unas judías pintas frescas y patatas gallegas del huerto de mi padre y voilà, así surgió esta genial receta. Fusión de lo mejorcito de la cocina catalana con las mejores verduras de la cocina gallega.
Un plato de cuchara, tenedor y cuchillo para un día festivo o uno de diario, pero lo importante, para disfrutar con la familia o los amigos. No hace falta que os diga que un buen vino o una cervecita bien fresquita le va que ni pintada.
Aquellos que os encontréis fuera de España las podéis sustituir por cualquiera de sus variantes locales: Alubias, judías, frijoles, porotos, habas, habichuelas, fréjoles, frísoles…
Os dejo con esta receta con unas legumbres de textura aterciopelada y untuosas al paladar. Una receta inimitable tras una paciente y mimosa preparación. ¡A por ellas!
Antes de cocinar los judías pintas. Secas
- En caso de decidirnos por las judías pintas secas, el día anterior las ponemos en agua templada con una cucharadita de bicarbonato o un puñado de sal.
- Las dejamos en remojo unas 10-12 horas durante la noche. No las debemos de tener más de 12 horas, ya que pasado este tiempo la legumbre pierde cualidades.
- Es importante que además de hidratar, las lavemos después para quitar posibles impurezas. También que no se cuele ninguna judía estropeada que te puede fastidiar un diente, lo digo por experiencia.
- Sólo nos quedará escurrir y apartar hasta el momento de preparar la cazuela.
Antes de cocinar los judías pintas. Frescas o en conserva
- Si son frescas como en mi caso sólo necesitas dejarlas en reposo una hora en un poco de agua caliente.
- Así ayudaremos a que se cocinen más rápidamente, una vez pasado ese tiempo sólo tenemos que lavarlas y añadirlas a la cazuela con el resto de las verduras, como os explicaré a continuación.
- Si vais a emplearlas ya cocidas lavadlas muy bien sin que quede ningún resto de la gelatina que rodea las judías y añadidlas al final de la cocción del guiso.
- Sólo para que se impregnen bien del sabor del resto de los ingredientes.
- Debo reconocer que este tipo de legumbres ya cocidas y envasadas en tarro de cristal ahorran mucho tiempo en la cocina.
Preparación de la base de las judías pintas y verduras
- Picamos la cebolla, el pimiento rojo y los dientes de ajo en trozos pequeñitos para que se vayan deshaciendo en la cocción.
- Al final casi no notaremos textura de ninguno de los ingredientes pero sí su sabor.
- Como a muchas personas no les gusta encontrar ajo en el plato podéis echarlo entero y retirarlo a mitad de la cocción o bien machacarlo.
- Lavamos y pelamos las zanahorias, cortamos en rodajas finas, cuanto más finas más rápido van a cocer.
- En una cazuela grande echamos un buen chorro de aove, las cebollas, el pimiento rojo, las zanahorias y los dientes de ajo. Sofreímos todo durante 10 minutos para que se mezclen bien los sabores.
- Añadimos las judías pintas ya hidratadas y escurridas. Sofreímos también durante 2-3 minutos removiendo con una cuchara de madera rápidamente y juntamos todo bien (3 minutos).
- Cubrimos con el caldo de carne o de verduras (importante que esté frío para que comience a hervir lentamente) hasta que quede totalmente cubierto de agua.
- Cuando empiece a hervir bajamos el fuego para que vaya más lento y no rompan las legumbres.
- Cuando lleve 1/2 hora cociendo le añadimos sal y pimienta al gusto, quitando la espuma que se forma en la parte superior con una espumadera y retirando el exceso de aceites e impurezas.
- En el caso de que sean judías frescas le quedarían unos 15 minutos más aproximadamente, si son legumbres secas una hora más.
- Pelamos las patatas y dependiendo del tipo de legumbre que empleemos. Tenemos que añadir las patatas cuando queden 15-20 minutos de cocción para evitar que se deshagan en el guiso.
- Otro dato importante es mover la cazuela para juntar sabores a partir de la mitad de la cocción. No debemos emplear la cuchara pues seguramente romperíamos las legumbres.
Preparación de las butifarras y presentación final de las alubias
- Ya en el final de la cocción pasamos a la plancha las butifarras hasta que tengan un color dorado y con un punto de caramelización.
- Yo en este caso empleé una sartén con unas gotas de aceite de oliva virgen extra, unos ocho minutos a fuego medio-bajo por cada lado.
- Cortamos en rodajas y ponemos en un lateral del plato donde vamos a comer las judías.
- Servimos en un plato hondo con las judías en el medio, las patatas y la butifarra en un lateral. ¡Así de fácil!
Podéis ver todas las fotos del paso a paso de la receta de alubias con butifarra en este álbum. No os perdáis detalle y os saldrá perfecta.
Consejos para unas alubias con butifarra de rechupete
- Puedes encontrar judías o alubias como legumbre fresca, seca o ya cocidas y en bote, además de varios tamaños.
- A mí me gustan las pintas, aunque creo que cada tipo va con un determinado plato. No es que haya una verdad absoluta en este tema y si un día tenéis que hacer una fabada puede ser incluso con este tipo de judía, aunque a la fabada asturiana le vayan mejor sus fabes.
- Yo os recomiendo emplear legumbres secas por comodidad, pues son fáciles de conseguir y de almacenar, ademas permiten controlar el punto de sal del guiso al evitar los tratamientos que traen los envasados.
- En caso de necesidad o falta de tiempo las judías en conserva son una buena opción aunque la presentación final no será muy buena, pues tienden a quedarse sin piel.
- Lo más importante es que compréis siempre la mejor que podáis dentro de vuestras posibilidades, legumbres nuevas y de buena calidad.
- Para vegetarianos la receta es la misma pero sin carne. Eso sí, como ingrediente esencial podemos emplear algas, muy buenas para que las judías tengan mejor digestión y además se cuezan antes.
- Si le añades un puñadito de arroz al estilo del «empredao», ya están que se salen.
- Si no tenéis tiempo para que se hagan lentamente (para mi la mejor opción) podéis prepararlas en la olla a presión y así acortamos el tiempo de cocción a un tercio. Para que le dé un toque más casero, se pueden cocer a tope en la olla a presión durante unos 12 minutos con la olla tapada y unos 15 minutos con la olla destapada.
- Muchos me preguntáis cuanta agua o caldo es necesaria para cocinar, pensad siempre que son tres partes de agua y una de legumbres. Y que por cada persona son necesarios unos 100 g. de legumbre, para que nadie se quede con hambre.
Hemos trabajado 3 horas y 20 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?
90 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.
Categorías: Recetas con judías blancas y alubias Recetas de invierno Recetas de legumbres y guisos Recetas de otoño