Para 2 2€/pers. 110kcal/100g
Ingredientes
- 10 gambones
- 2 dientes de ajo
- Vino blanco o cava
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal gruesa
Que llevar marisco a la mesa es sinónimo de vítores y sonrisas de oreja a oreja no se le escapa a nadie. Que casi siempre significa destinar una buena parte del presupuesto de toda la comida, tampoco. Por suerte hay alternativas al marisco más caro que también están deliciosas y que, además, se pueden preparar de una forma muy muy rápida. Dicho de otra forma, no hay que gastar mucho dinero ni tiempo para dejar a nuestros invitados chupándose los dedos…
El gambón es un crustáceo similar al langostino (sí, como su nombre indica es una especie de gamba de mayor tamaño). Distinguirlos es bastante sencillo: el segundo es rosáceo y el gambón más bien anaranjado. Una vez en la boca también hay diferencias: el langostino tiene la carne más dura y su sabor es intenso, mientras que este primo de la gamba sabe más suave y su carne es tierna. Eso sí, igualmente están deliciosos y son muy nutritivos, como el resto del marisco los gambones aportan una gran cantidad de proteínas y muy poca grasa, suman diversos minerales y vitaminas a nuestra dieta con la peculiaridad de que sacian rápidamente sin aportar apenas hidratos de carbono.
Hechos al horno, como vamos a ver, no solo están deliciosos sino que mantienen todas sus propiedades. Marisco bueno, bonito y barato listo para disfrutar en solo unos minutos!
Preparación de gambones al horno
- Comenzamos preparando los gambones: les retiramos los bigotes para que sean más fáciles de manejar y los vamos colocando en una fuente refractaria, sin dejar huecos entre ellos.
- Llenamos un cuenco con aceite de oliva virgen extra y con la ayuda de una brocha de silicona o de una cuchara, extendemos una capa de aceite sobre los gambones. Pelamos y picamos el ajo en trozos muy pequeños, lo echamos sobre los gambones.
- Calentamos el horno a 190º C con calor arriba y abajo.
- Echamos un chorro de vino blanco o de cava sobre los gambones y espolvoreamos un puñado generoso de sal gruesa.
- Horneamos durante 15 minutos. A la hora de servir este plato aprovechamos los jugos que han soltado los gambones para, con la ayuda de un pincel, pintarlos y que tengan un aspecto brillante y todavía más apetitoso.
Hemos trabajado 2 horas y 10 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?
20 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.
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