Para 10 1.05€/pers. 280kcal/100g
Ingredientes
- 400 ml. leche entera
- 50 g. azúcar
- 50 g. de harina fina de maíz
- 2 huevos
- 1 rama de canela
- 50 g. mantequilla
- 300 g. harina de trigo
- 150 g. azúcar
- 60 g. almendra molida
- 200 g. mantequilla muy fría
- 2 huevos
- 1 huevo, para pincelar el pastel
Hoy voy a preparar una receta dulce que en mi casa causa furor, el pastel vasco o Euskal pastela. Un postre típico del País Vasco, como la panchineta o la gaxua, originado en el País Vasco-Francés y con influencia clara de la cocina francesa, donde recibe el nombre de Gâteau Basque. Es una receta un poco laboriosa, pero os aseguro que merece la pena el tiempo y trabajo que conlleva. Una vez que lo probéis se convertirá en uno de vuestros postres preferidos.
El origen de este pastel, allá por el siglo XVII, lo encontramos en la región vasco-francesa de Lapurdi. Entonces, su elaboración distaba mucho de lo que conocemos hoy en día. Su relleno, a base de frutos como el higo o la cereza negra fue evolucionando hacia lo que hoy nos ofrecen los maestros pasteleros. Es tan importante el arraigo de este postre, que hasta podemos encontrar un museo en el que se hace un recorrido histórico sobre la gastronomía vasca y en especial sobre este típico postre.
Originariamente se hacía sólo con harinas, como los bizcochos, después se empezó a rellenar de frutas (normalmente con cerezas o con mermelada de cerezas) y más tarde se pasó a rellenar con crema pastelera. En la actualidad encontramos el pastel vasco relleno de muchos tipos de cremas, frutas, almendras, licores y hasta chocolate. Yo os presento la receta más clásica y tradicional, que es mi preferida. Queda jugoso por dentro y crujiente por fuera, toda una delicia que no podéis dejar de probar.
Receta pastel vasco
Preparación de la crema pastelera
- Comenzamos preparando una crema pastelera y, para ello, optamos por usar el microondas. En menos de 10 minutos está lista y es comodísimo.
- Introducimos todos los ingredientes en el vaso de una batidora de mano y trituramos hasta obtener una mezcla homogénea. La volcamos en un recipiente amplio y hondo, lo introducimos en el microondas y programamos 3 minutos a máxima potencia.
- Retiramos el recipiente, le damos unas vueltas a la crema con unas varillas manuales, y lo llevamos de nuevo al micro. Programamos un par de minutos más y removemos de nuevo.
- Repetimos la operación una-dos veces más o hasta que la crema pastelera esté bien espesa.
- La cubrimos con papel film, en contacto con la crema para evitar que se forme costra, y la dejamos enfriar en la nevera.
Preparación de la masa quebrada
- Es importante trabajar la masa con la mantequilla bien fría, para ello la cortamos en dados y la introducimos en el congelador unos minutos antes de arrancar con su elaboración.
- En un recipiente amplio y hondo mezclamos bien la harina, el azúcar, la almendra molida y un pellizco de sal. Añadimos la mantequilla cortada en dados. Mezclamos con las yemas de los dedos pellizcando la mantequilla hasta obtener una especie de migas.
- Batimos los huevos y los añadimos a la mezcla anterior. Removemos con suavidad y evitando calentar la masa en exceso.
- Terminamos amasando ligeramente con las manos para homogeneizar.
- Dividimos la masa en tres partes iguales (una será la base, otra el contorno y la tercera la tapa) y las envolvemos con papel film. Las guardamos en la nevera por lo menos una hora.
Montaje y terminación
- Cuando la masa esté bien fría retiramos una de las porciones de la nevera. Espolvoreamos una mesa de trabajo con harina y la extendemos con ayuda de un rodillo, que quede del mismo grosor por toda la superficie.
- Cortamos un círculo del diámetro del molde (20 centímetros en mi caso) y lo colocamos sobre la base, previamente cubierta con papel vegetal.
- Sacamos otra de las porciones de masa de la nevera, espolvoreamos de nuevo la superficie de trabajo y la estiramos dando forma alargada. Cortamos una o dos tiras del alto del molde y las colocamos en los laterales, cubriendo todo el contorno. Presionamos con la base para unir bien ambas piezas, con ello evitamos que se salga el relleno.
- Rellenamos el interior del pastel con la crema pastelera, que habrá de estar bien fría, y trasladamos el molde a la nevera durante unos 15-20 minutos.
- Ahora solo queda extender la última porción de masa que tenemos en la nevera sobre la mesa enharinada y cortar otro disco del diámetro del molde.
- Lo colocamos sobre la crema pastelera y pellizcamos el contorno de la masa, presionando ligeramente para cerrar bien el pastel. Podemos aprovechar para hacer un dibujo bonito en el borde.
- Hacemos unos cortes superficiales en forma de rombo en la superficie con ayuda de un cuchillo afilado, a modo decorativo.
- Batimos el huevo que nos queda y pincelamos suavemente la superficie del pastel.
- Lo introducimos en la parte inferior del horno, precalentado a 180ºC con calor arriba y abajo, y lo cocemos durante 40-45 minutos o hasta que esté dorado.
- Retiramos el pastel del horno y esperamos a que se atempere (mejor, incluso, frío) antes de antes de desmoldar y servir, pues en caliente este pastel es muy frágil.
- Servimos como postre o a la hora de la merienda, junto con una bebida al gusto. Con café casa estupendamente o con cualquier otra bebida caliente.
Consejos para un pastel vasco perfecto
- Quizás lo más importante para que nuestro pastel vasco salga perfecto sea que sus dos elementos, crema pastelera y masa quebrada, estén bien fríos a la hora de montarlo.
- Hay que mantener ambos en la nevera hasta el momento de utilizar, especialmente la masa quebrada, para que no pierda dureza y resulte más manejable.
- Usar un molde de base desmontable es más que recomendable. Así es más sencillo pasarlo a un plato de servir sin causar un estropicio. Siempre en frío, claro está.
- Se puede enriquecer en relleno con una fina capa de mermelada de cerezas, aunque también se le puede poner de otro tipo de frutas o chocolate. Todas las opciones son magníficas.
Hemos trabajado 3 horas y 30 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?
100 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.
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lo9 probare y luego te comento, gracias por darnos esta receta. cristina