¿Gas, vitrocerámica o inducción?
La cocina es la estancia de la casa donde pasamos más tiempo en la vida actual. La pandemia nos ha hecho más caseros y los programas de cocina nos han hecho ser más cocinillas, por eso ha llegado el boom de las reformas de cocina. Todos buscamos tener la mejor cocina, un diseño actual, y electrodomésticos de última generación y de menos consumo.
Si estás pensando en renovar la placa de tu cocina, antes de tirarte a la piscina, debes saber ciertas cosas para elegir la mejor opción. En función de lo que la uses, el tamaño de tu cocina y por supuesto, tu presupuesto, te encontrarás con diferentes opciones como la cocina a gas, la placa de inducción o la vitrocerámica convencional.
Podemos hablar de dos tipos de placas de cocina, las de gas y las eléctricas. Para uso doméstico las que ganan por goleada son las placas eléctricas, hablamos de vitrocerámicas y placas de inducción. Aunque las de gas aún se ven en algunas casas y sobre todo para nivel profesional.
¿Gas, vitrocerámica o inducción? Os dejamos las principales características en la que debemos fijarnos
Cocinas a gas
Las cocinas de gas supusieron una revolución hace años, pero hoy en día no son las más habituales en nuestros hogares, aunque hay gente que dice que el sabor de la comida no tiene comparación con las eléctricas. Sin embargo, son las cocinas elegidas para los restaurantes, por lo que nos puede dar una pista de que algo bueno tienen.
Suelen venir como muebles independientes, aunque ya hay placas con quemadores de gas que se instalan como una vitro, encastrada a la encimera. Vamos a valorar las ventajas y desventajas de este tipo de cocina para que puedas valorar si es la que tú elegirías.
Ventajas
- Son compatibles con todo tipo de sartenes y ollas del mercado y no tienes que cambiar la batería.
- Son las más rápidas a la hora de calentar.
- Se regula de forma manual y es mucho más fácil que las eléctricas.
- El gas natural es más económico de la luz.
Inconvenientes
- Es el tipo de placa más peligroso por la llama.
- Son más difíciles de limpiar y se ensucian más.
- Debes tener cerca una toma de gas o bombona de butano.
Cocina con la vitrocerámica
La placa vitrocerámica es el tipo de placa más comercializada, se introduce en el mercado como alternativa a la cocina con fogones de gas. Supuso todo una revolución y mucha gente dio el salto del gas a la electricidad para evitar el coste que suponía de la instalación de gas natural, ya que la vitro solo necesita tener un enchufe cercano. La vitrocerámica genera calor mediante una resistencia eléctrica situada bajo un cristal cerámico.
Ventajas
- Son las más económicas en cuanto a precio de compra.
- Se puede usar con cualquier olla o sartén siempre que tengan el fondo plano.
- Son más fáciles de limpiar y estéticamente más atractivas.
- La instalación es más sencilla y no requiere una toma de gas.
- Los fuegos o zonas de cocción tienen distintos tamaños y formas.
- Existen multitud de marcas y tipos para todos los gustos y bolsillos.
Inconvenientes
- Lentitud en calentar.
- Necesitan un tiempo para aumentar o descender el calor que necesitamos.
- Son menos eficientes que las placas de inducción.
- El consumo de electricidad es mayor.
Cocinar con inducción
Las placas de inducción son la opción más moderna del mercado, crean un campo magnético detectando el recipiente y enviando ondas magnéticas rápidamente. La energía absorbida se convierte en calor y calienta la olla o sartén para empezar a cocinar los alimentos.
Ventajas
- Se calientan rápidamente.
- Fáciles de limpiar, con una bayeta y un limpiador no abrasivo es suficiente. No se necesita rascador porque la superficie no se calienta.
- Son más seguras, porque utilizan tecnología fría mediante electroimán, que permite que solo se caliente el recipiente.
- Consumen hasta un 20 % menos electricidad que las vitrocerámicas convencionales.
Inconvenientes
- Se necesita que utensilios sean de hierro, por lo que deberás cambiar la batería.
- La electricidad es más cara que el gas.
- Son las más caras y necesitas una inversión inicial más alta que el resto.
Antes de comprar tu cocina, fíjate en:
- Tamaño: El tamaño estándar es de 60 x 60 cm, con tres fuegos, pero las hay más pequeñas con 2 fuegos y más grandes con 4 fuegos. Dependiendo del número de personas en casa y del tamaño de tu cocina, puedes elegir la mejor opción.
- Potencia: Debes tener en cuenta la potencia contratada en tu domicilio, para que al usar la placa eléctrica que compres, no supere el máximo y salte el limitador.
- Consumo: El consumo es algo esencial a la hora de elegir, las cocinas de gas son las más económicas y las vitrocerámicas son las que más consumen. Y las de inducción son las más eficientes.
- Bloqueo infantil: Si tienes en casa niños, es importante comprar una placa con un bloqueo especial para que los más pequeños no puedan encenderla.
- Indicador de calor residual: es bueno si tienen la opción de indicar que partes de la placa aún están calientes una vez apagadas, para evitar quemaduras.
- Programación: Las placas más modernas tienen la opción de programar la de minutos y que luego se apague sola.
- Conexión a internet: hay placas que se pueden manejar desde el móvil, con una propia app. Lo lógico es que estés presente mientras cocinas, pero la tecnología llega a todos los lados.
¡Seguro que encuentras la cocina perfecta!
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