Cocina y alimentación sostenible.
Sostenible: que se puede mantener durante largo tiempo sin agotar los recursos o causar grave daño al medioambiente.
Esta definición de la real Academia Española de la lengua lo deja claro. Más allá de la ecología sostenible, la economía sostenible, o el desarrollo sostenible, existe también la cocina sostenible.
Esa cocina que podemos practicar y con la que podemos contribuir en menor o mayor medida a economizar nuestros recursos (alimentarios y económicos) y a respetar nuestro planeta.
Ahora bien, ¿cómo hacemos que nuestra cocina sea sostenible? Pues desde nuestros electrodomésticos: debemos elegir aparatos que sean energéticamente eficientes, hasta con nuestra planificación.
Una buena planificación y organización a la hora de ponernos delante de los fogones… ¡e incluso antes! A la hora de hacer nuestra lista de la compra.
Sostenibilidad medioambiental
- Antes de tirar un alimento, piensa. Gestiona bien los residuos, tanto los orgánicos como los que no lo son (plásticos, papel y cartón, vidrio…). Hacer una cocina sostenible también pasa por sostener nuestro medioambiente.
- Para eso es muy necesario tener conciencia, saber lo costoso que es el despilfarro. No solo para nuestro bolsillo, que también, porque tirar la comida es tirar nuestro dinero, sino para la salud del planeta.
- Los procesos de reciclaje requieren importantes inversiones, así que colabora con tu granito de arena, separa orgánico y el resto de envases para contribuir a una mejor conversión en el futuro.
Sostenibilidad para tu salud
- Una dieta equilibrada es una de las bases fundamentales para alcanzar el bienestar. Para ello es necesario saber qué tipo de alimentos necesita nuestro cuerpo, nuestro ritmo de vida, y asimilar hábitos saludables.
- Para hacer una cocina sostenible en este aspecto vuelve a ser fundamental una buena planificación.
- Incluir todos los grupos de alimentos en nuestra dieta y distribuirlos entre todas las comidas del día y entre los siete días de la semana.
Sostenibilidad cultural
- Nuestra alimentación está directamente ligada a nuestra tradición cultural. La gastronomía es un elemento diferenciador entre las distintas culturas del mundo.
- Eso también es algo que debemos cuidar: mantener nuestra identidad gastronómica es una forma de sostenibilidad.
- Nuestros sabores, nuestras costumbres, nos definen. Y nuestro hogar, nuestra cocina, debe tener un sabor propio, que permanezca en el tiempo, en los paladares y en los corazones de los que entren y habiten en ella.
Sostenibilidad económica
¡Ay, nuestro bolsillo! A esto sí le damos importancia, por la cuenta que nos trae. Es quizás uno de los aspectos de los que somos más conscientes a la hora de planificar, cocinar y consumir.
Por eso es importantísimo saber comprar, lo justo, lo que realmente necesitamos, para preparar nuestros menús semanales y así evitar despilfarrar comida y dinero.
Algunos trucos para no desperdiciar comida
En España se desperdician cerca de 7,7 millones de toneladas de comida cada año. En los hogares, se desperdicia el 42% del total de alimentos. ¿Y cómo se traduce esto? Pues en que cada persona tiramos unos 35 kg de comida a la basura cada año.
Pero quizás lo entendamos mejor hablando en dinero: cada uno de nosotros tiramos en comida 250€ al año. Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, lo que más se desperdicia en los hogares españoles son frutas, hortalizas y verduras (el 45% de productos sin cocinar que tiramos cada año), seguido de los lácteos (13%).
Por otra parte, entre los alimentos cocinados, destacan las lentejas, las ensaladas y la tortilla de patatas como las comidas que más terminan en el cubo de la basura.
En el blog encontraréis un especial de recetas de aprovechamiento, todas perfectas para no tirar nada de comida en casa. Ser como ha sido siempre en casa de madres y abuelas. Economía familiar que poco a poco se ha ido perdiendo, un modo de vida que tenemos que recuperar.
No podemos olvidar todas las recetas como las sopas, cremas y purés, platos con base de carne, legumbres y arroz.
Es muy importante que todos nos concienciemos y nos comprometamos. Por nuestro bien y por el bien del planeta.
¡Sigue un consumo responsable!
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