Rosa Belmonte
Dos joyas (una, extravagante)
'Adolescencia' quizá sea lo mejor que se ha estrenado en mucho tiempo
Poco antes de terminar la Segunda Guerra Mundial, el dictador español le envió una misiva personal a Churchill en la que le proponía combatir conjuntamente la expansión de la URSS
Rosa Belmonte
'Adolescencia' quizá sea lo mejor que se ha estrenado en mucho tiempo
José F. Peláez
Es el momento de dejar claro, de una vez por todas, que no habrá un gobierno de coalición con Vox
Javier Villuendas
Santiago Gerchunoff publica el ensayo 'Un detalle siniestro en el uso de la palabra fascismo'
El cineasta y cómico español defendió a su socia María Luisa Gutiérrez en el podcast de Albert Castillón sobre el discurso tras recibir el premio
José Luque
En democracia la soberanía reside en el Pueblo. Si no combatimos una tras otra las mentiras de los políticos, seremos culpables
El libro 'Del Palmeral a la estepa' recoge la epopeya de los alistados en la División Azul en Elche, víctimas de una represión que quisieron combatir defendiendo a otra
Luis Peñalver Alhambra
Si nadie lo remedia, se nos avecinan tiempos difíciles de desastres climáticos y políticos, pero también morales
Rebeca Argudo
Han justificado la violencia física con un «es que eso no es periodismo». Como si eso justificara la violencia
Agustín Pery
Para la vice, el baremo del buen demócrata es Nicolás Maduro
Jesús Lillo
No es mal sitio un museo para hacer memoria democrática y celebrar la victoria sobre Francisco Franco
Fútbol
Los aficionados del Juve Stabia, equipo en el que está cedido por la Lazio, corearon su nombre mientras hacían el gesto del 'Duce'
Pedro García Cuartango
El derrumbe de Siria nos ilustra sobre la importancia de fortalecer la libertad y la pluralidad, para preservar un sistema que es el mejor de los posibles
Luis Herrero
El sistema resiste el embate de las hordas malignas. Su gran protector, el paladín de la prosperidad, aguanta como un jabato
La segunda vuelta tendrá lugar según lo previsto, el 8 de diciembre, entre la conservadora liberal Elena Lasconi y el ultra Călin Georgescu