Una soltera acude a 'First Dates' en busca de su 'crush' y la cita acaba de forma inesperada: «Nos vamos a un hotel»

Cris (23) es azafata, reside en Toledo, y aterrizó en 'First Dates' la noche del viernes 15 de septiembre con una misión particular. En su caso no buscaba a su media naranja, sino encontrarse con ella. Y es que cuando se enteró de que su 'crush', una amiga de un amigo suyo, iba a acudir al programa de citas de Cuatro ella decidió apuntarse también. El plan le salió redondo: no solo la emparejaron con la chica que le gustaba, sino que además, sintieron un flechazo al conocerse.

«Si tú pides que te presentemos a Laura, nosotros te presentamos a Laura», concedió Carlos Sobera. Eso sí, saliéndose del guion habitual, las solteras no se encontraron directamente en la barra, sino que Cris le dejó primero una nota en la que le contaba que la había visto en una fiesta y la quería conocer más.

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Gesto que a Laura (26), su cita, le gustó. «Me parece que la persona que voy a conocer debe ser muy interesante, lucha por lo que quiere». Pero al verla, su cara no le sonaba, así que Cris tuvo que explicarle que se vieron en una fiesta y tenían amigos en común.

Una de las cosas que a Cris le llamaron la atención de Laura en el evento donde se vieron por primera vez es su personalidad. Según explicó la madrileña, le gusta hacerse la payasa para hacer reír a la gente. A ella, por su parte, le maravilló la naturalidad de Laura desde el primer momento.

Congeniaron tan bien que incluso comparten interés por temas 'macabros'. Al explicarle la azafata la diferencia entre tanatoestética y tanatopraxia, Laura llegó a la conclusión de que Cris era el amor de su vida «¿Dónde ha estado esta chica siempre?», bromeó.

Los nervios no impidieron que se sintieran muy a gusto com la otra, y el sentido del humor fue el hilo conductor de una velada perfecta. Entre juegos en el reservado, acabaron interpretando una escena de película con beso apasionado en la mejilla incluido.

«Creo que me he enamorado», soltó Laura a la hora de tomar la decisión final. La respuesta a la pregunta de si querían una segunda cita no pudo ser más clara por su parte. «Sí, de hecho vamos a irnos ahora mismo a un hotel».