Jorge Javier Vázquez presenta a un auténtico «portento de la naturaleza»: «¡Soy como una estufa, tó el día caliente!»

Lourdes ha acudido al programa de Jorge Javier Vázquez como el que va a pedir a la Virgen de Lourdes un milagro: «ay, Jorge, que cada semana hay una chica nueva en la cama de mi hijo y por las noches parece que van a tirar los tabiques abajo». El presentador de 'El Diario de Jorge' no ha visto un problema grave en ello pero ha querido intermediar entre ella y su hijo, Rául, al que ha denominado como un «portento de la naturaleza». «Camas calientes, cuernos, tabiques, ¡lo tiene todo! ¡Qué ganas de conocerte!», ha referido Jorge Javier al dar paso a este sevillano de 19 años.

El chico no ha defraudado. Más bien todo lo contrario. Y a tenor de la invitación final que le ha hecho Jorge Javier, creo que él ha quedado igualmente impactado. Ojo, y es que Raúl ha hablado sin cortarse ni un pelo: «Me gusta mucho estar pegado, el mamoneo. Y soy como una estufa, ¡tó el día caliente! Me gusta mucho el cachondeo en todos los sentidos».

Él pensaba que iba a un casting de 'Quién quiere casarse con mi hijo' y cuál no sería su sorpresa al encontrarse con esta historia. Ha confesado que necesita «mucha actividad, por lo que intento hacerlo y no estar mucho sin eso. Más de una semana y media y las hormonas ya me empiezan a asaltar», ha referido. Es este impulso sexual el que tiene preocupada a su madre y lo que ha hecho que piense en Jorge Javier y 'El Diario de Jorge' como solución a este problema. «Me preocupa mucho la frenética vida sexual de mi hijo, la verdad», ha confesado en directo.

Es así hasta que se ha dado el cara a cara y Lourdes le ha dicho a su hijo que debe cambiar, que no debe seguir así y que «ha de comprometerse». Ella ha explicado que ha tenido que insonorizar incluso el dormitorio de Raúl para poder ver la tele y no estar escuchando los ruidos cuando tiene visita. «Es incómodo», le ha espetado en la cara.

El joven ha dicho que va a poner de su parte. Ante tal escena, Jorge Javier se ha 'apiadado' del chico y le ha dicho que no se preocupe, «que si tu madre no quiere escuchar ruidos, ahora pides mi teléfono en producción que yo tengo una casa muy grande y vivo solo. ¡Puedes venir con tus amigas cuando quieras!». ¿Le tomará la palabra? Viendo lo espontáneo y jovial que es Rául, seguramente le haga caso y quién sabe si un día Vázquez cuenta cuánto ruido hace este sevillano cuando deja salir a ese «portento» que lleva dentro.