Tania y Samuel acaban hechos un mar de lágrimas en el final con más drama de 'La isla de las tentaciones 5'

La quinta edición de ‘La isla de las tentaciones ’ ha llegado a su fin. Este jueves 22 de diciembre Telecinco ha emitido el último capítulo del ‘dating show’, con el reencuentro de las parejas como punto álgido. El de Samuel y Tania era uno de los más esperados. Los dos cayeron en la tentación durante la experiencia y se enfrentaban por primera vez a cara a cara a sus respectivas infidelidades.

Después de ver las imágenes la tensión estalló y se enzarzaron en un cruce de reproches cargado de tensión. Ella defendía que su novio se había comportado peor, pues hubo sexo con Elena . Él, por su parte, consideraba más flagrante lo de su chica, quien ha llegado a sentir algo por Hugo Paz .

Sin llegar a ningún punto en común, llegó el momento de que Sandra Barneda les formulara la pregunta definitiva: ¿Cómo querían volver a España? La primera en tomar la decisión fue Tania . «Yo lo veo y lo quiero muchísimo pero después de las imágenes que he visto creo que él tampoco está enamorado porque sino no te acuestas con otra persona. Yo no me podría ir de aquí con él, porque sé que lo pasaría mal», respondió, a lágrima viva.

«Yo tampoco, y aun así me quiero ir contigo. Quiero estar contigo para siempre, porque siempre, siempre he pensado en ti», insistió un conmocionado Samuel, intentando de que cambiara de parecer. El canario tuvo que abandonar durante unos minutos la hoguera para recomponerse.

La canaria, no obstante, no cambió de parecer. «Me he dado cuenta de que querer no es poder y yo no podría irme con él y olvidar todo lo que ha pasado. Me duele mucho porque lo quiero muchísimo, creo que saldríamos peor de lo que vinimos. Creo que necesito un tiempo sola, aclararme. Pero no te voy a mentir, me gustaría seguir viendo a Hugo fuera. Me ha dado confianza, me ha dado estabilidad, si he llegado a sentir algo por él es porque no estaba tan enamorada como creía», se sinceró, todavía en llanto.

Pese a confesar sentir algo por el tentador, reafirmaba su idea de irse sola. Y al que fuese su pareja durante más de dos años, le deseó lo mejor. «No te voy a tener rencor y me vas a tener siempre en tu vida. Has sido lo más importante». Pero Samuel no tenía consuelo. «Me voy sin el amor de mi vida».