De profesión, concursante: los 'hijos' de 'Saber y ganar'
Solo unos pocos elegidos pueden vivir de los programas culturales. O, al menos, contar con los premios como un sueldo más. Ganan millones en las privadas, pero hicieron la mili en TVE. Antes eran una especie de sabios, cultos por devoción. Hoy manda el estudio metódico y la preparación. Entre ellos se conocen y ayudan
![Los concursantes profesionales de 'El Cazador' con su presentador, en el centro. De izquierda a derecha, David Leo, Paz Herrera, el presentador Rodrigo Vázquez, Ruth de Andrés, Erundino Alonso y Lilit Manukyan](https://s3.abcstatics.com/media/play/2022/07/28/concurso-tele-U401113124436zGG--1248x698@abc.jpg)
Cuando el joven poeta malagueño David Leo recibió el dinero del bote de ‘Pasapalabra’ –aproximadamente la mitad de los 1,8 millones de euros que ganó, la otra mitad fue para Hacienda – estaba en números rojos. Después pudo comprarse una bici estática, cuenta ... con ironía, y un piso. Había estudiado Filología Hispánica y publicado varios libros de poesía, así que su ocupación principal no eran los concursos, pero ya había pasado por cinco o seis programas. Se estrenó en ‘Grand Slam’, el primero en el que ganó dinero fue ‘Avanti’, aunque, como todos, también hizo la ‘mili’ en ‘Saber y ganar’, que reparte más prestigio que dinero.
«Durante unos años fueron mi principal fuente de ingresos. Antes de ‘Avanti’ aún no me había independizado. Como toda la gente de mi generación, que es bastante precaria, vivía un poco al límite, pero siempre que iba con el agua al cuello salía algún concurso o algún premio de poesía», reconoce. Ahora sí puede decir, de pleno derecho, que es concursante profesional, pues protagoniza, con otras cuatro estrellas de los concursos, ‘El cazador’ y ‘La noche del cazador’ (La 1); dos programas en los que estos supergenios tienen que tratar de evitar que otros aspirantes se lleven el bote del programa. Una suerte de Tacañones, pero con más poder y sabiduría. «Y como dicen que en televisión siempre hay que tener un plan B, estoy estudiando Psicología y japonés».
Paz Herrera, su compañera, empezó hace 25 años en ‘Saber y ganar’. «Me lo pasé bien y gané dinero y cuando veía que había más posibilidades de concursar me apuntaba, y como soy mujer y de Cantabria enseguida me reclutaban.Yo siempre digo que nunca pierdes nada, el dinero que no te llevas tampoco lo tenías antes. Y no tienes gastos por desplazamiento», cuenta orgullosa. «Ahora sí puedo decir que me dedico a esto, porque trabajamos para TVE. Yo soy autónoma y he trabajado como arquitecta, pero es difícil simultanear otros trabajos con las grabaciones . Solo es capaz de hacerlo mi compañera Lilit», bromea. Ni el bote de ‘Pasapalabra’, uno de los premios más jugosos de la pequeña pantalla, en su caso de 1,3 millones de euros, te permite vivir sin trabajar. «Mi premio fueron menos de 600.000, porque pagué un 54% de impuestos. Me compré un piso y luego vas poquito a poco gastando, tampoco te da para retirarte»,
Ellos forman parte de un grupo de elegidos que viven directamente de los programas culturales, aunque hay decenas de caras conocidas de los concursos para las que estos formatos son un oficio más, aunque sea en régimen de pluriempleo. Óscar Díaz, uno de los integrantes de los Dispersos de ‘Boom’ resume el mito del concursante profesional tirando de experiencia: «Empecé a concursar hace 20 años, tengo 50 y mi coche tiene 14 años y vivo de alquiler», bromea. «Yo en total habré ganado unos 700.000 euros, pero a lo largo de veinte años son unos 35.000 euros adicionales cada año, lo que te permite ir más desahogado pero tampoco mucho más. Yo seguiré trabajando y, si se pone a tiro algún otro formato y la cabeza me da, encantado».
Caras conocidas
Pero para algunos directores de casting, señala, ser una cara conocida es una desventaja. «En ‘¿Quién quiere ser millonario?’, por ejemplo, querían gente competente pero a la que no se le hubiera visto tanto», relata Díaz, que trabaja también como traductor y comunicador. En otros casos, recurren a ellos porque ya saben que el público ha generado cierta empatía con ellos . Aunque también pueden despertar envidias, porque ven en ellos una suerte de «sabelotodos», relata Miguel Herrero, que además de participar en varios concursos a principios de los 2000 ha hecho una tesis doctoral sobre la historia del género.
«Antes a las productoras no les gustaba encontrarse las mismas caras», recuerda Antonio Sempere, aún más veterano, que concursaba en televisión cuando solo había dos cadenas públicas. «Antes también había una élite, pero no como ahora que ya se han profesionalizado, incluso oficialmente, como en ‘El cazador’. Hace años íbamos un poco tapándonos, cuando nos decían si teníamos experiencia decíamos que en algún concurso, porque sabíamos que eso no jugaba a nuestro favor. Yo intentaba ir virgen porque sabía que eso era lo que me convenía».
«Ahora está todo más preparado, antiguamente se dejaba todo más al azar, cualquiera que se inscribiese podía participar en un programa tipo ‘1,2,3’. Hoy tienes que pasar varios casting y dar cierto perfil de imagen , además de demostrar conocimientos. Se busca también que seas televisivo, como en una entrevista de trabajo», apunta Herrero.
A estudiar
Si los casting son casi una prueba laboral, los concursos se han convertido, para muchos, en prácticamente una oposición . «Antes íbamos con la cultura general de casa, con la de jugar al Trivial y ese tipo de juegos», rememora Sempere. Paz Herrera, que reconoce que ahora estudia más que en su época de concursante porque no solo se representa a sí misma, sino también a ‘El cazador’, cree que el estudio se ha hecho ahora norma. Díaz, también de esa vieja escuela, afirma que él también «va con lo puesto» a los concursos, pero es cierto que lee muchos libros, revistas y prensa.
«En cualquier caso sé que hay formatos como ‘Pasapalabra’ en los que si no vas con una preparación máxima no tienes nada que hacer. En los cinco últimos años han puesto el listón muy alto», puntualiza. Y si no, que se lo digan a David Leo, que para entrenar para ‘Cifras y letras’, se vio todos los programas de la web de ‘Saber y ganar’ antes de sentarse frente a Jordi Hurtado y se preparó durante dos o tres años para ir a ‘Pasapalabra’: «Diccionario a saco. Y cuando ves muchos programas encuentras patrones, temas recurrentes».
Como en 'Gran hermano'
Coincidir en varios programas, sobre todo en aquellos donde su participación no se limita a una entrega, ha generado entre estos concursantes profesionales un compadreo que va más allá de la pequeña pantalla . Varios grupos de ‘Boom’ nacieron, de hecho, de amistades forjadas en ‘Saber y ganar’, el veterano concurso de TVE presentado por Jordi Hurtado, «el bautismo» de los concursos para unos y «la mili» para otros. «Hay varios grupos de Whatsapp y Facebook sobre los distintos formatos y un foro histórico de ‘Saber y ganar’ con concursantes como aficionados. Y también hay quedadas», reconoce Díaz, que, como casi todos, cita a varios superconcursantes entre sus amistades. «En ‘El cazador’ los participantes no se tienen que conocer entre ellos ni a nosotros, pero llega un punto que es inevitable. En ‘La noche del cazador’ habrá sorpresas en este sentido, con concursantes ilustres», confiesa Herrera.
Miguel Herrero incluso sostiene que hay grabaciones de concursos que eran, en la trastienda, una especie de ‘Gran Hermano’ «Llorábamos cuando un amigo se iba porque compartíamos viajes, experiencias, vivíamos en hoteles... Con una aparición puntual es más complicado. De hecho un compañero de entonces me llamó hace poco para participar en ‘Crush’».
De cara al público, sus picos de fama no tienen nada que envidiar a los de las grandes estrellas . Paz Herrera tuvo que llevar peluca durante semanas para no descubrir que había ganado el bote de ‘Pasapalabra’, pues prometió en antena que se raparía. Todavía hoy muchos concursantes míticos de principios de los 2000 afirman que les saludan por la calle como si fueran de la familia. Porque se han colado en más hogares de los que imaginaron, compartiendo conocimientos e ilusión. Y vuelta a concursar.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete