Huele a peluche quemado en Villa Montaña

Novo

05/10/2020
Actualizado a las 18:56h.

Compartir

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Iniciar sesión

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete

La gran escena del episodio 4 de «La isla de las tentaciones» la protagonizó «Rosito». «Rosito» es un peluche sobre el que pende una amenaza de desintegración. De confirmarse, creemos que Mayka , que es su legítima propietaria, sería capaz de imitar a Melyssa y plantarse en Villa Montaña . Si es así, lo más prudente para Pablo sería abandonar la isla, pero no en barco, sino en cohete. Para que no le pille fijo. Incluso le recomendaríamos que, como ocurre en las pelis de testigos protegidos, cambiase de nombre, de vida y hasta de planeta. Miedo nos da Mayka como le maten su peluche.

El capítulo 3 de «La isla de las tentaciones» nos dejó a Melyssa desencadenada. Y justo ahí arrancó el episodio de ayer, en el que el primer desencadenado fue Tom y la última, ya lo hemos dicho, Mayka .

«Ya no eres mi novio», le había dicho Melyssa en su visita sorpresa a Villa Montaña , allá donde los solteros tontean con las tentaciones. «Se acabó», remarcó la muchacha antes de tomar las de Villadiego . Lejos de caer en la depresión –lejísimos en realidad–, Tom vio el cielo abierto ante esas palabras . Las interpretó como una invitación en bandeja a hacer el cabra loca. El luto por el fin de su relación de nueves meses le duró unos nueve minutos. «Quiero desconectar, quiero bailar», anunció, de pie en el sofá, en modo rey del harén. «Me dejo llevar», confesó a cámara. El montador del programa consideró oportuno pinchar en ese momento música propia de la tercera hora de una macroboda, pero lo que en realidad pedía esa coyuntura era un clásico de Antonio Vega : «Se dejaba llevar».

«Pon tus manos a volar», anima el difunto genio madrileño en esa canción. Y eso es lo que hizo Tom . En concreto en dirección a Sandra , 21 años, estudiante de moda, que previamente había declarado: «Yo no vengo a romper nada». Se supone que se refería a la vajilla.

«¿Por qué estás siempre conmigo? ¿Por qué haces daño a mi corazón», le preguntó Tom a Sandra –quien ya buscó el amor en «Mujeres y Hombres y Viceversa»– mientras se acurrucaban en la cama.

Sandra: ¿En qué piensas?

Tom: En hacerte un beso.

No tiene un dominio absoluto del idioma, y puede que eso explique la expresión. O puede que fuese un lapsus y, en lugar, de «hacerte un beso» lo que quería decir es que le quería hacer lo otro. Fuese o no un cruce de cables, el caso es que Tom le hizo un beso a Sandra . Luego se fueron a dormir. Cada uno en su cama, por ahora.

A la mañana siguiente, Tom se levantó con un minúsculo cargo de conciencia, una levísima resaca amorosa. Si el programa llega a ser «First Dates» en lugar de «La isla de las tentaciones» lo habrían presentado como «arrepentido, pero no mucho». Él prefirió decir «algo arrepentido». Se declaró hecho un lío: «Sandra me gusta, pero quiero a Melyssa» , proclamó Tom «Corazón Loco» (recuerden a Machín : «cómo se pueden querer / dos mujeres a la vez / y no estar loco»). Eso fue antes de su paradisíaca cita bajo las palmeras con su ya amante, encuentro en el que contamos dos besitos más. «No puedo más. Quiero ser feliz», se explicó él ante las cámaras. Ya desatado, la besó en la piscina, en el salón de la casa, en la cama –durmieron juntos– y no quedó rincón de Villa Montaña en la que no lo hiciese, o eso nos pareció. «Me estoy dejando llevar al cien por cien», analizó Sandra . Fíjense si hay conexión que hasta ya emplean la misma expresión. Incomprensiblemente, Antonio Vega siguió sin sonar. En «¿Quién quiere casarse con mi hijo?» no dejaban escapar ocasiones así.

Mientras tanto, Melyssa habitaba no en otro villa, sino en los mundos de Yupi : «Pórtate bien, Tom», decía a cámara, ignorante de que su novio se había tomado al pie de la letra su «ya no eres mi novio». Previamente, Sandra Barneda , la Mónica Naranjo de esta edición, se había erigido en Comité de Competición y había anunciado la sanción para Melyssa por atropellar las normas. Fue blandita y le ofreció esta disyuntiva: o se iba de la isla sin hablar con su aún mozo o se quedaba y prometía no quebrar nunca más el confinamiento de Villa Playa , que es el paraíso de las chicas y los solteros. Eligió esto último.

Apuntemos aquí que, cronológicamente, el de Tom y Sandra no fue el primer beso en los morros de la edición (descontamos, claro, los interparejas), pues antes está el pico que le lanzó Mayka a Marta ante los ojos de Kevin, seguido de un provocador «aprende». El tal Kevin va de enamorado, y con ese rollito melancólico estaba visto que le iban a robar la tostada. Así fue: para su segunda cita con un soltero, Marta se decantó por el empresario alicantino Dani . Él le hace dudar: «¿Qué camino eliges? ¿El bien o el mal?», se preguntó la muchacha a cámara.

Marta no parece ya la misma que le montó una escenita de celos a su novio Lester –por nada– en el episodio uno . Se le ve más liberada, y a punto estuvo de profundizar con el tal Dani . Es lo que tiene la isla. El novio, Lester , tampoco pierde el tiempo, puesto que durmió, sin roce, con una de las solteras, Patri , que en la isla está sacando brillo a su banda de Miss Baix Llobregat .

Capítulo aparte merecen los dos reincidentes de la isla, Óscar y Andrea , que se aparearon en la edición anterior. Por si alguien tenía alguna duda –en Mediaset fijo que nadie– les avanzamos que ambos están dispuestos a repetir. No entre ellos, porque acabaron mal y, sobre todo, porque están en islas diferentes.

Andrea ha puesto en su diana al novio de Melodie , Christian , quien la eligió para su segunda cita. Por tres razones: por «guapa», «simpática» y «para probar otras cosas». Hablando de probar, esto le dijo la tentación: «Me encanta la leche». «No va a poder resistirse», pronosticó la muchacha, muy segura de que será la primera que consiga un doblete en el «reality show». A esas alturas, Christian aún ignora que Melodie ha dado por acabada la relación por una frase. Es de suponer que cuando se entere, Andrea habrá logrado el objetivo. Una vez conseguido ese doblete, le auguramos una gran carrera en Mediaset: se posicionará sin duda para «La Casa Fuerte» –si es que a Mediaset le da por repetir esta estupidez sin más sentido que alimentar el tamagochi de la audiencia de «realities»–, tendrá garantizado un polígrafo –de lo que sea– en «Sábado Deluxe» y no la descarten para «Supervivientes» . Ella va a poner toda la carne en la parrilla.

En cuanto a Óscar , va allanando el camino hacia la cama de Mayka , aún pareja de Pablo . «Me hace sentirme bastante especial. Quiero a mi novio, pero me gusta estar contigo», le dijo ella, antes de elegirlo para su segunda cita. Pronunció entonces la frase que, tras una edición y pico de «La isla de las tentaciones» , todos sabemos que es el preludio de los fuegos artificiales: «Me está ayudando muchísimo».

Sí, amigos y amigas: « me está ayudando muchísimo» en boca de una novia de este programa es siempre el anticipo de un «hay más imágenes» de Sandra Barneda . Y no imágenes de las que son agradables de ver, no. Dicho y hecho: apenas unos minutos después del «me está ayudando muchísimo», vimos a Mayka y Óscar besarse y sobarse en una piscina. «Estoy cien por cien feliz y no quiero que acabe», proclamó la muchacha.

El doblete de Óscar es ya un hecho , y por ello huele a peluche quemado en Villa Montaña . Solo es cuestión de que el corneado se entere. Y es que Pablo , el aún novio de Mayka , duerme con un muñeco de su novia, que ésta le dejó como prueba de amor y para que se acordase de ella. «Como me pongo los cuernos, lo quemo», anunció segundos después de que viésemos –nosotros, no él– la escenita piscinera entre Mayka y Óscar. Algo se huele, y eso que aún no ha ido a la hoguera de la que saldrá quemado: «Es como los tiburones, ve la sangre y ataca» , cataloga a Óscar, el gran depredador de la isla.

El programa avanzó y el peluche reapareció. Pero esto lo contaremos más adelante. Vayamos por orden cronológico, que si nos dejamos llevar –como Tom– nos perdemos.

Y lo siguiente que ocurrió, justo antes del inicio de la aguardada segunda hoguera de chicas, es que aterrizaron en la isla otros incautos que vienen a probar su amor –en su caso, de un año de duración– en «La isla de las tentaciones» . Alessandro y Patry se llaman. En tan breve espacio ya ha habido tiempo para que ella lo cornease, según confesaron abiertamente. Pero Patry no se arrepiente de aquello, «porque si sucedió es porque tenía que suceder», sostiene. Él dijo que estar separados un tiempo les va a venir bien para conocerse mejor, y a los que creen que el «roce hace el cariño» les explotó la cabeza en ese momento. En fin, que esta pareja promete fuertes emociones. Propias y ajenas.

Y llegó, ya entrado el lunes, el momento más esperado. La hoguera de chicas. Abrió el turno Marta : «Es mi droga de la que me tengo que desintoxicar», dijo de Lester antes de ver siquiera un plano de su novio con la que su aún novia llama «La chiguaga» , también conocida como la bombera –oposita a ello– pirómana Elisa . También vimos cómo masajeaba a Miss Baix Llobregat antes de irse a la cama. Se indignó muchísima su aún novia por el interés de Lester por una chica de 19 años, y fue entonces cuando se produjo uno de los grandes momentos de la noche. «No es Elisa», tuvieron que aclararle sus compañeras sobre la masajeada. Y se le quedó la carita de la foto de abajo.

«Esto va a acabar mal», pronosticó Marta tras ver a su Lester jugando a dos bandas. «Esto» es lo suyo, y estamos con ella. Bien no acabará.

La siguiente en sufrir el VAR de los cuernos fue Melodie . En este momento se produjo un fallo en Matrix, o bien se olvidó de que había dejado a Cristian en el capítulo anterior , pues anunció solemne que se estaba replanteando la relación. «Me da risa ver a Cristian siguiendo el juego de Andrea. Siento decepción y un poco de alivio», reflexionó. «Es muy patética», descalificó a su rival femenina. Y acabó diciendo la que creemos es una verdad objetiva: «No se merece una mujer como yo a su lado».

Seguidamente, vimos a Mayka muy indignada porque Pablo le decía a Dorothy que que cierto tilín le hacía. Comparado con su más que tonteo con Óscar , aquella era jauja, pero se ve que la muchacha tiene memoria no de Dorothy sino de Dory , el olvidadizo pez que buscaba a Nemo .

Pero lo más dramático estaba por llegar. Fue cuando pasaron las imágenes de Pablo en su habitación mostrando el peluche a dos solteras y anunciando su ejecución en caso de ser corneado. Mayka no lo pudo aguantar. «¡Cómo puede ser una persona tan mala! Eso me duele más que cualquier caricia. Si el peluche se puede salir de ahí, que me lo traigan», exigió.

Conocimos entonces vida y obra del peluche. Se llama «Rosito» y la ha acompañado casi desde que nació. «He llorado mucho encima de él», confesó. Desatada, fuera de sí, decidió que aquello marcaba un antes y un después: «Yo no quiero estar con él» .

Se refería a Pablo , no al peluche . Y, estaba visto, los memes sobre «Rosito» inundaron las redes sociales. Para muestra, un botón:

Y así acabó el cuarto episodio, con Melyssa aún en la inopia mientras Tom se deja llevar, y con Mayka entrando en la historia de «La isla de las tentaciones» con su momento «yopormipeluchemato».

Ver comentarios (0)

Reportar un error

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete