«A la próxima, te doy una hostia»: Julia Otero relata cómo un jefe la acosó sexualmente

Este domingo 24 de abril la periodista ha sido la invitada de ‘Lo de Évole’ . Y como acostumbra, ha hablado sin tapujos. Bajo la luz ‘La Luna’ , el programa de TVE donde Otero entrevistó a personalidades como Paul McCartney, Lola Flores, Plácido Domingo o Mario Conde , Évole ha trasladado a su invitada y a los espectadores a los años 90. «Esto tiene como una liturgia que impresiona. Es bonito recrear el ambiente de ‘La luna’ , que era una sencilla conversación de dos personas. Qué revolucionario es hoy, y qué normal era entonces», ha expresado al ver la escenografía.

Por aquel entonces el programa supuso un tremendo ‘boom’, pero la gallega ha aclarado que el contexto actual nada tiene que ver con lo que era la televisión en el año 89, que es cuando apareció 'La Luna' . «Era una televisión única, aún no habían llegado las privadas. Por tanto, la gente veía, se reunía, la familia, se sentaba en el sofá y veían todos la televisión por la noche", explica Julia Otero sobre los momentos en los que consiguió mayor repercusión. Les gustara o no les gustara el programa, al final lo veían. Tenía audiencias de 14, 15 y 16 millones de personas».

Aún así, bajo ningún concepto siente nada de nostalgia del pasado. Ni siquiera ha pensado en él durante este último año en el que ha estado apartada de las ‘ondas’ luchando contra un cáncer de colon. «Estos meses he tenido más tiempo, pero lo he usado para mirar hacia adelante y no hacia atrás », ha señalado.

El motivo, según ha contado la periodista, es que ocupó su tiempo en pensar las cosas que tal vez no podría llegar hacer, y por tanto, «la nostalgia es del futuro que has imaginado y has soñado, no del pasado». «De repente llega un diagnóstico que te borra el futuro que has construido. Y pierdes más tiempo en eso que en analizar el pasado. No tuve actitud revisionista en absoluto».

De su etapa mediática en televisión, Julia Otero ha sacado a la luz en ‘Lo de Évole’ la otra cara de la moneda: la violencia mediática derivada de la notoriedad. «Probablemente hoy las críticas de ese tipo sería inasumibles. Nadie escribiría de mí lo que entonces». La periodista ha contado que se encontró una contraportada de ‘El País’ con el titular ‘ Julia Otero , ¿puta o virgen?’.

Como mujer joven y triunfadora en la profesión, la periodista estuvo muy expuesta. Preguntada por Évole, ha narrado uno de los episodios más duros de su trayectoria Sufrí acoso. Afortunadamente lo resolví rápido. «El señor estaba sentado detrás de la mesa de dirección. Se levantó, y se colocó en una silla a mi lado. Acercó la silla, me puso la mano en la rodilla y me dijo: ‘no seas tonta’. Le pegué un manotazo y le contesté: ‘De ese lado eres mi director, pero si cruzas ese camino y te pones aquí, a la próxima, te prometo que te doy una hostia».

La respuesta del individuo, según ha relatado Otero, fue: «así me gustan las gallegas».Volvió a su sitio, y nunca más. «Tuve suerte, porque me consta que con otras de la misma empresa, seguía, seguía y seguía. Ese tipo de situaciones yo creo que todas las hemos vivido».

Évole ha sacado a colación su papel como pionera en la defensa del feminismo. La invitada ha respondido con una reflexión. «Un principio precioso feminista dice que cuando una mujer avanza, ningún hombre retrocede».

Al respecto, el catalán ha animado a la invitada a lanzar un mensaje a las mujeres que votan a Vox. Defendiendo antes que nada el derecho de cada uno a votar a quien quiera, las ha invitado a mirar bien el programa electoral y a que se planteen por qué les molesta tanto la ley contra la violencia de género. «Por ejemplo, de todas las necesidades que tiene Castilla y León, hay solamente dos cosas que piden nada más empezar: que se derogue la Ley de Violencia de Género , que no se puede hacer porque es estatal, y la Ley de Memoria Histórica. Si pudieran, nos meterían en casa a las mujeres», ha sentenciado.

En relación con la actualidad, la presentadora de ‘Julia en la onda’ también se ha mojado sobre otro tema candente, como la situación actual de la Corona en España. «Yo soy racionalmente republicana, pero a mí no me molesta la Corona siempre que sea una figura representativa que esté más allá de los partidos políticos, que sea el jefe del Estado y que tenga una tarea de representación», ha explicado.

No obstante, hay dos condiciones fundamentales que debe cumplir. «La neutralidad, exquisita siempre. Le ha de dar igual dar la mano a un señor muy de izquierdas que a otro muy de derechas y no se le puede notar nada. Y el segundo aspecto importantísimo, la honestidad».

Y en otro orden de cosas, la invitada ha desvelado algunas pinceladas sobre su vida privada, como que ha tenido tres o cuatro hombres importantes en su vida; entre esas parejas, una persona más famosa que ella. Sin embargo, como acostumbra con su faceta personal, ha optado por la discreción, alegando que «mi vida ha sido muy bien guardada».