El torpe montaje de Ivana y Hugo Sierra en Supervivientes 2020

Ya podían haber esperado Ivana Icardi y Hugo Sierra un par de semanas para iniciar una relación sentimental. Con quince días de por medio tampoco nos lo creeríamos, pero los concursantes habrían demostrado un poco más de inteligencia a la hora de perpetrar el que creen un plan maestro para ganar «Supervivientes 2020» . Creen los amantes despechados que el «papelón» de traicionados les va a hacer escalar posiciones en un concurso en el que la audiencia ya está de vuelta. Ni el más mínimo flirteo ha precedido a los besos y arrumacos que Hugo e Ivana se daban entre las rocas hondureñas al tiempo que solicitaban la archiconocida hora sin cámaras.

Hay que reconocer que Adara y Gianmarco lo hicieron mejor . Al menos, ella invirtió su debido tiempo en hacer públicas sus dudas y problemas de pareja. El italiano hizo lo propio manejando los tiempos de su conquista (cierto es que otras le fallaron antes) y, al final, salió una bonita historia que, pactada o no, convenció al público y llevó a los amantes al podio de sus concursos .

Lo de Hugo e Ivana, sin embargo, apesta desde el primer momento. Ya en sus primeros encuentros, los concursantes hablaban de su malestar con Adara y Gianmarco, tema de conversación que en Telecinco interesa más que el coronavirus y con el que sabían que los vídeos estaban asegurados. Y de eso trata «Supervivientes» , de protagonizar el máximo número de vídeos posibles para ganar el favor del público de cara a las posibles nominaciones. Ni sacudir un cocotero gigante daría tantas buenas imágenes cómo besarse con la ex de Gianmarco Onestini.

Lo malo de esta relación temprana a la que le han faltado los preliminares es que, o los tórtolos inventan un giro argumental efectivo o la historia se acabará yendo al garete más pronto que tarde. Tres meses son muchos para dilatar una historia que no nos creemos desde el primer minuto así que, o hay vídeos y «salseo», o la audiencia no dudará en mandar en casa a estos estrategas de mercadillo. Sin duda, primera semana intensa en «Supervivientes 2020».