‘El escuadrón suicida’: unos villanos para salvar el mundo

Una segunda oportunidad del equipo en pantalla para salvar el mundo, aunque sean villanos, y también para la taquilla, necesitada de la frescura irreverente de estos malos tipos buenos.

Ya no están Will Smith ni el fallido Jared Leto . Del inaugural grupo de mercenarios resisten tan solo un par, con la Harley Quinn de Margot Robbie en cabeza, la única actriz capaz de resucitar el carisma con el que esta desquiciada psiquiatra conquistó las viñetas en sus primeras apariciones, y también su mejor baza para empoderarla, logrando que su personaje, villana florero, sobreviviera por su cuenta sin el Joker . Esta secuela, con escenas para su exclusivo lucimiento, es la prueba definitiva para saber si la sanguinaria princesa payaso se convierte, de una vez por todas, en uno de los valiosos activos de DC.

Para Robbie, el personaje mantiene su esencia. «Es la misma Harley Quinn que la gente ha conocido antes. Simplemente se encuentra en unas circunstancias diferentes, con un tipo de grupo diferente y en un momento ligeramente diferente de su vida», afirma la actriz sobre la evolución del personaje, una más en la primera película, protagonista en su aventura en solitario ‘Aves de presa’ y ahora líder inusual de este mortal escuadrón. «Aquí se ve envuelta en una gran historia y se une a un montón de villanos con personalidades diferentes. Para mí siempre es intrigante ver cómo reacciona ante esas personalidades. Pero que no se equivoquen los fans, Harley Quinn sigue siendo esa loca adorable que la gente ha visto antes», asegura Robbie, que desvela un romance tan salvaje como las escenas de acción de la película, que se estrena este viernes.

El nuevo y mejorado Escuadrón Suicida , escrito y dirigido por James Gunn, es una versión más grande, más larga y más indómita del cómic de John Ostrander. Incluso se permite la muerte de unos cuantos protagonistas en la primera escena de acción del filme. Joel Kinnaman y Viola Davis repiten junto a Robbie, y se unen al peculiar grupo de mercenarios John Cena, Daniela Melchior, Idris Elba, Peter Capaldi y Juan Diego Botto.

Cascos tipo ‘váter’, un infantil tiburón semihumano con ganas de ‘ñam ñam’ y sexo letal son las armas con las que este extraño batallón combate a unos tiranos dictadores y a un ‘kaiju’ con forma de estrella de mar que lanza esporas comecerebros. Igual que uno de los personajes del grupo con las ratas, a las que reúne en un séquito imparable, James Gunn le da un propósito a este peculiar grupo de inadaptados: su locura convence casi tanto como la personalidad que derrocha.

Como su escuadrón, el director también se redime con esta película, después de comprobar que a un chiste le bastan unos segundos para perder la gracia pero nunca caduca si es para criminalizar al que lo suelta. Unas bromas antiguas sobre el Holocausto, el 11-S, el sida o la pedofilia defenestraron en 2018 al cineasta, al que Marvel despidió de la saga ‘Guardianes de la galaxia’. De poco sirvieron sus disculpas y la defensa de su equipo espacial, encabezado por Chris Pratt y Zoe Saldana . La salvación, como la de los villanos de este escuadrón, estaba en cambiarse de bando, algo que hizo uniéndose a las filas de DC para comandar esta aventura. «Mi trabajo siempre muestra la búsqueda de los personajes por conectarse y las dificultades que encuentran para hacerlo. En este filme, tienen más dificultades que en cualquier otra historia que haya escrito porque no solo tienen estos terribles dramas de fondo, sino que también han tomado decisiones horribles en sus vidas», abunda el director. «Reflexionar sobre esas decisiones y encontrar algo positivo de su viajes me emocionó», admite Gunn, que habla de sus personajes pero parece hacerlo también de sí mismo.

«Siempre está la gran lucha circunstancial, salvar al mundo, salvar al país o lo que sea, pero lo que ellos están tratando de resolver son sus traumas y sus secuelas », matiza Robbie, para quien el talento de James Gunn reside , sobre todo, en su capacidad para regalarle a todos los personajes su gran momento.

«La lucha personal siempre está en sintonía con la acción, siempre está ligada a los estados emocionales de cada uno de ellos. Cuando alguien sufre por su conflicto interno siempre tiene algún tipo de peligro físico enfrente. James Gunn es, sin duda, el mejor de todos para una película a gran escala como esta», alaba la actriz, para quien el rodaje fue tan surrealista como el resultado final del filme: «El set de la playa fue con el que empezamos la filmación y, sin duda, fue el mejor por el que he caminado nunca. Un tanque de agua gigante con una máquina de olas, palmeras reales y pirotecnia alrededor... fue como estar en una película de la guerra de Vietnam, que es un género que realmente adoro». Y no le falta razón a la intérprete, que junto a parte del elenco protagoniza en el primer tramo de la cinta una escena tan incendiaria como las del ‘Apocalypse Now’ de Francis Ford Coppola . Solo falta ‘La cabalgata de las Valkirias’.

En un momento crítico para Hollywood, marcado por el reciente enfrentamiento legal de Scarlett Johansson con el estudio que fue su casa durante más de una década por el estreno híbrido de ‘Viuda Negra’ y una violación millonaria de su contrato, Margot Robbie aboga por la experiencia ritual de disfrutar de esta delirante película en la oscuridad de las salas. « Ir al cine es lo que más me gusta en el mundo . No es algo nuevo, desde niña me gusta ir al cine. Solía colarme en los escalones de la sala solo para poder oler las palomitas de maíz y ver pasar los trailers de las películas», rememora la actriz, que ya atesora dos nominaciones al Oscar en su carrera.

Sin entrar en polémicas, Margot Robbie defiende una experiencia que, para ella, no es equiparable a ver películas desde el salón de una casa. «Me pasó una cosa muy divertida en el cine el otro día, cuando fui con un par de amigos a ver ‘Un lugar tranquilo 2’. Mi marido, que reservó las entradas, no se dio cuenta de que las había cogido en 4D, lo que significa que la silla se mueve y sale agua. Ver una película de terror cuando la silla se mueve es un gran problema. Fue tan gracioso... Fue increíble. Es la primera vez que vuelvo al cine desde la pandemia y estaba realmente emocionada», reconoce la intérprete, que intenta acudir al cine siempre que tiene la oportunidad. «Estoy muy feliz de que estén abiertas las salas y de que el público pueda ver esta película en la pantalla grande», concluye.