Eduardo Strauch, superviviente de los Andes, habla de la película de Bayona: «Esta es la historia como siempre esperé que se contara»

El 13 de octubre de 1972, un avión de la Fuerza Aérea Uruguaya se estrelló en medio de la cordillera de Los Andes, dejando a decenas de personas atrapadas entre gigantes de nieve, temperaturas extremas, sin refugio ni alimento. Fueron 16 las personas que lograron salir con vida de esta tragedia, entre ellos Eduardo Strauch.

Este martes la conmovedora historia ha sido nominada a un Óscar por mejor película internacional gracias a 'La sociedad de la nieve', el filme del director español JA Bayona que ha logrado que el relato tanto de los supervivientes como de los muertos vuelva a ser recordado.

«Esta es la historia como siempre esperé que se contara», asegura Strautch. El largometraje ha llegado al cine no solo para los espectadores, sino también para los familiares de los muertos, algunos con «heridas» sin sanar, y que consiguieron comprender la realidad a la que tuvieron que hacer frente «como si ellos estuvieran dentro», dándose cuenta de «todo sufrido».

Noticia Relacionada

Lo que es verdad y lo que no en 'La Sociedad de la Nieve', la película de Bayona sobre la tragedia de los Andes

María Carbajo

Bayona ha logrado retratar con auténtico rigor y dureza los 72 días que los supervivientes pasaron en el Valle de las Lágrimas tras el accidente del vuelo 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya: repasamos y matizamos algunos detalles

Eduardo, junto a sus primos Fito y Daniel Strauth, que viajaban juntos en el vuelo 571 en dirección a Argentina y fueron los que dieron el paso en la decisión de alimentarse de los cadáveres de sus amigos y compañeros. «Los 13 estuvimos de acuerdo en que esta era la única manera de sobrevivir. Teníamos 25 años y queríamos vivir de todas las maneras y convencimos bastante rápido de que era la única solución«.

«Una vez vencimos el tabú, era claro que era lo que teníamos que hacer. Fue un gesto maravilloso de solidaridad», relata el uruguayo, que se encargo junto a sus dos familiares de cortar y repartir el alimento.

La tragedia de Los Andes ya había saltado a la gran pantalla en 1993, pero para los supervivientes es la que ha conseguido retratar de la mejor manera sus vivencias. «El gran mérito de '!Viven!' está en la difusión», asegura Strauch, pero «que cayera en las manos de este maravilloso Bayona» ha permitido que la historia se llevara al cine «como se debe haber contado».