Crítica de 'Rita' (**): Paz Vega dirige un drama adulto con mirada infantil

Podría decirse que es la historia de una mujer (que interpreta la propia Paz Vega), de su matrimonio y su vida estrecha junto a sus dos hijos, Rita, de 7 años, y Lolo, de 5. Pero lo que ofrece la narración de la directora y la cámara jugosa de Eva Díaz Iglesias es el día a día, los juegos, las risas junto a su hermano o su abuela, el liviano romance con un vecinito y lo rutinario y extraordinario en ese barrio sevillano de la niña… Y también, muy sutilmente y desde la mirada de una niña, la realidad del trato infame, humillante, que tiene su padre hacia su madre; un hombre bruto y propenso a la violencia, un personaje quizá en exceso encorsetado que interpreta Roberto Álamo.

Es interesante el trabajo que hace Paz Vega de ambientación, de atmósfera y de planificación, con muy buen gusto en la elaboración del plano y con alguna caída en lo poético que no molesta: ya procura que al otro lado de la imagen, en su fuera de campo, rechine lo peor de la historia que cuenta. Quizá resulte algo abrupto en su camino hacia el desenlace, en sus peldaños desde el encanto de la mirada infantil hasta la fea realidad adulta, pero queda impreso el sello de una directora con cosas que decir.