Aldama y sus largos en El Trastámara

Al indagar aparecieron dos noticias de este periódico del año 2017 firmadas por María Jesús Pereira. En ellas se informaba de que el empresario madrileño Víctor de Aldama había adquirido por 1,6 millones el Club Natación Sevilla al imponerse a la cadena de gimnasios Forus Deporte y Ocio, dirigida por Ignacio Triana, hasta hace poco presidente del club de básquet Estudiantes. Yo fui uno de esos pibes que aprendió a nadar en el histórico Trastámara, con sus manguitos y su churro, que aún tiene en su pituitaria grabado a fuego ese olor a cloro y a silicona. Al menú infantil de después en el Burger de Reyes Católicos.

El caso es que el expresidente del Zamora estuvo un tiempo trasteando con aquella inversión, hablando de proyectos de reconstrucción e incluso llegando a pactar con su rival en la puja inicial la cesión de la explotación del complejo una vez construido. Todo ello para acabar vendiéndoselo tres años después a la propia Forus. Y aquí viene lo gracioso de esta historia. ¿A qué no saben qué día se cerró la venta de la instalación por 4,1 millones según las cuentas de la propia compañía? El 13 de marzo de 2020. Aquella memorable jornada en la que se declaró el Estado de Alarma. Exactamente unos días después de que diera el pistoletazo de salida para que todos los golfos de este país empezaran a forrarse con el bisnes de las mascarillas. Qué cosas, eh.

Este jueves, el nexo corruptor de todos los chanchullos según la UCO, tras un retiro espiritual en Soto del Real, decidió pedir pista para apuntar con recortada a un nutrido grupo de socialistas entre los que se encontraban 'El 1' y su consorte, Ábalos y Koldo, Santos Cerdán y varios ministros del Gobierno. Y lo que te rondaré, morena. Con que la mitad de lo que contó el 'Gominas' sea verdad, podríamos estar ante el mayor escándalo de corrupción de nuestra historia moderna.

Los cortesanos más kamikazes balbucean que son meras invenciones de un charlatán que quiere salvar su culo, pero no caen en la cuenta de que la credibilidad del chivato reside en su propia autoinculpación. Además, un letrado experimentado como José Antonio Choclan, no dejaría dar este concierto a un cliente si no tuviera documentos probatorios que le respaldasen. El PSOE y la sincronizada repiten que Aldama se ha tirado a una piscina sin agua, nosotros hoy ya sabemos que de natación algo sabe. Los va a hundir con él. No se puede matar a quien ya está muerto.