Quererte tanto

Cambiaba tanto como las versiones de Mazón sobre su comida el día de la catástrofe. La penúltima versión de su larga reunión con la periodista es que lo hizo como presidente del PP valenciano. Y que no dijo antes que fue una comida del PP porque nadie preguntó. Como si eso importara. Habría que estar en la chueca cabeza de Carmen Calvo cuando diferenció entre Pedro Sánchez y el presidente del Gobierno. Cuca Gamarra habla de la «altísima honestidad política» de Mazón, que «ha vinculado su futuro político a la reconstrucción en la que está volcado desde el primer momento». No sé, en la muerte de Jimmy Carter, 'The New York Times' lo ha calificado como «obstinado y decente». Con eso no vas a ningún sitio, sobre todo si, como a los valencianos, el cielo se te cae encima.

Sale Mazón con que no era el presidente de la comunidad autónoma sino el presidente del PP y te tienes que reír pese a la desgracia. Como te ríes cuando Mayte Zaldívar cuenta su Navidad: «Nos sentamos todos a la mesa y teníamos las cenizas de Julián, así que le pusimos a la urna un gorro de Papá Noel y lo sentamos al lado de la chimenea para que presidiese la mesa como siempre hacía». Al principio pensé que era una inocentada, pero no. España es imbatible, que diría Sánchez con el chuletón. A la vez, el Museo del Prado desea lo mejor para 2025 con Ana Belén cantando 'España, camisa blanca de mi esperanza'. Sin música. Sólo su voz. Con los cuadros de fondo (algunos de la extraordinaria 'Arte y transformaciones sociales en España. 1885-1910'). Con esa canción que de Blas de Otero solo tiene la frase «camisa blanca de mi esperanza». Es de Víctor Manuel. «Navaja, barro, clavel, espada, la muerte siempre presente nos acompaña en nuestras cosas más cotidianas y al fin nos hace a todos igual». ¿A quién no le va a gustar España con ese vídeo del Museo del Prado? Al carajo los del Estado fallido. Dijo en estas páginas de ABC una experta británica en desastres: «Una de las cosas más difíciles de hacer es preguntarse después de una tragedia: ¿Hubo algo que funcionara bien? No digo esto por ser optimista, sino porque es necesario construir sobre lo que ya se hace bien». A Marcela Serrano, le preguntan en 'El Cultural' por España. «Lo resumiría en una sola palabra… España es ¡cool!». Como canta Ana Belén, quererte tanto me cuesta nada.