Vivimos como suizos
Lolita
Civilización en España ha sido Lola Flores, no Pedro Sánchez y sus socios
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No sé si es blasfemia pop que Lolita a veces me guste más que Lola Flores. Me pasa con Liza Minnelli y Judy Garland. Venga, no blasfemo con Lola Flores, que es sagrada. Pero qué grande es Lolita. Qué cantante, qué actriz (también en ... el teatro), qué tía más graciosa. Ayer se estrenó en SkyShowtime 'Las invisibles', esa serie sobre camareras de piso donde ella es un poco Norma Rae (aunque hay una normarraíta). Y tiene un nieto, como Sarah Lancashire en 'Happy Valley'. La ficción es tipo 'Mujeres desesperadas' con su recién muerta que habla. Vale, también está eso en 'El crepúsculo de los dioses'. Pero aquí las mujeres desesperadas son a la vez precarias. Precaria su economía y precaria su salud. De momento, sólo hay un capítulo. En el avance del siguiente se ve a Lolita diciendo que los 'spas' son un camelo. «Unos chorritos te van a quitar los dolores… Los dolores te los quita esto», dice blandiendo un blíster de ibuprofeno o similar.
Tiene razón Julie Andrews en 'Sonrisas y lágrimas' cuando se entera del compromiso roto de capitán (anda que dejar ir a Eleanor Parker): «La reverenda madre dice que cuando el Señor cierra una puerta, en algún lugar abre una ventana». Se ha acabado 'Succesion' y llega 'Las invisibles' a los lunes. Soy muy del producto nacional. De 'La promesa' y ahora de esta (ay, que la marquesa, o sea, Eva Martín, también sale aquí). Muy de una mala serie, que no digo que lo sean estas, antes que de un debate entre Pedro Sánchez y Feijóo. Qué digo uno, seis. Las cosas de Sánchez. Le dicen desde el PP, así de primeras, que no venga con extravagancias. Hombre, que quiere los debates incluso antes de que empiece la campaña.
Seis fueron los combates entre Jake LaMotta y Sugar Ray Leonard. El sexto se llamó 'la matanza de San Valentín'. Es la paliza que sale en 'Toro salvaje', la película de Scorsese. Aquí ni uno es el elegante Sugar Ray Leonard ni otro el bruto LaMotta. Y bajando al ring de la palabra, tampoco son estos dos Gore Vidal y William F. Buckley y sus diez legendarios debates televisivos en 1968. Quiere Sánchez seis debates, quizá para decir cosas como esa que ha tuiteado Rafael Simancas. Dice que lo que viene con el PP y Vox (aunque él pone por delante a Vox) es «derogar, derogar y derogar cada avance civilizatorio, hasta volver a la Edad Media…». Amelia Valcárcel, que acaba de publicar 'La civilización feminista' (La Esfera de los Libros) decía ayer en la entrevista de Erika Montañés que la coalición ha gobernado contra las mujeres. También que «nadie en su sano juicio admitiría que sea más fácil cambiarse de sexo en el Registro que cambiar de compañía telefónica». La ley Trans debe de ser uno de esos avances civilizatorios de los que habla Simancas.
Civilización en España ha sido Lola Flores, no Pedro Sánchez y sus socios. Civilización es Lolita, no Irene Montero.
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