Hazte premium Hazte premium

Arma y padrino

Que dimita Ayuso

El estupor es constante, así que, contra todo pronóstico vivimos en estado de estupefacción continua

¿Quién vigila al vigilante?

Otra noche en Crystal Lake

Rebeca Argudo

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Sánchez ha conseguido que llevemos tanto tiempo sin salir de nuestro asombro que no recordamos siquiera por dónde ni cómo entramos en él. El estupor es constante, así que, contra todo pronóstico (contra la propia definición misma del concepto) vivimos en estado de estupefacción continua, ... con lo que nos induce el efecto contrario: la paradoja de que ya nada nos sorprenda por asombro persistente. Aún así, pese al entumecimiento general de nuestra capacidad para el desconcierto, hay que reconocer que la ocurrencia del presidente de aprovechar la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo Europeo para pedir la dimisión de Isabel Díaz Ayuso es especialmente chocante. ¿Será nerviosismo y preocupación? ¿Será la desesperación del que se siente intocable pero atisba que algo escapa a su control?

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación