Hazte premium Hazte premium

perdigones de plata

Mascaradas

El artista puro no necesita excusas para la mascarada, la vulgaridad en cambio precisa desahogo infantil de fecha fija

Ramón Palomar

Esta funcionalidad es sólo para registrados

En aquella gira de 1990 Jerry Lee Lewis lucía 55 años bastante óptimos teniendo en cuenta la vida que se había bebido. El climax del concierto nos sacudió cuando se levantó del teclado y le propinó una coz a la banqueta. Su rizado tupé mutó ... en filamentos de alambre electrificado. Ahí, las 4.000 almas que saturábamos la sala de conciertos, rugimos como una manada de búfalos. El 'Killer' todavía conservaba energía destructora. El dueño de la sala me sopló que el rockero había exigido para el camerino una caja de botellas de Johnnie Walker etiqueta negra y propagué la noticia como un heraldo inflado de herejía noctívaga.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación