PERDIGONES DE PLATA
La gran bicoca
El verdadero chollo, la genuina canonjía laica, viene cuando logras ser expresidente autonómico
Un tipo reconcentrado
No es justo
Siempre se aseguró que en España sólo existía un oficio mejor que el de ministro, y era el de exministro. Metamorfoseado en 'ex' te seguían ofreciendo respeto y cariño por los trabajos realizados, por la elevada responsabilidad que te deparó el destino. En cambio, apenas ... te anclaban las penosas servidumbres que acompañan el cargo, como por ejemplo que te pregunten por Puigdemont cuando juegas al golf, como le sucedió a Óscar Puente. De toda formas, el prestigio adherido a la condición de exministro supongo que corresponde a otros tiempos. Entonces un ministro era un ministro, vamos, que era algo. Como todo se degradó, pues hasta Irene Montero, Alberto Garzón y tal y tal alcanzaron dulce poltrona ministerial, hoy lo de exministro ya no segrega el mismo perfume de jefazo.
Además, puestos a escoger, cualquiera prefiere ser expresidente de una autonomía, por ejemplo de la catalana. Pere Aragonès, prototipo de 'mil homes' planiano, se embolsará en su nueva condición de 'ex' algo más de 9.000 pavetes a la buchaca. Para redondear la soldada, dispondrá de coche oficial, escolta, oficina y asistentes. Algunos datos arrojan una conclusión algo preocupante; esto es que, buena parte de mocedad española, se decanta hacia las oposiciones a funcionario porque intuyen que su vida será un mar de relax, porque la paga acude puntual a fin de mes y porque disfrutar de los bellos días moscosos supone una bicoca formidable, sobre todo cuando los haces coincidir con festividades de calendario, pues de ese modo alargas el asueto. Se equivocan estos jóvenes cegados ante la fruslería funcionarial por culpa del atolondramiento de la tierna edad. El verdadero chollo, la genuina canonjía laica, la irresistible sinecura viene cuando logras marchamo de expresidente autonómico. Ahí gozas de tiempo libre para enredar, para intrigar, para maquinar, para lo que sea. Cuando las criaturas comprendan esta magia, ya no les ilusionará dedicarse a las exploraciones espaciales. ¿Y tú que quieres ser de mayor? Expresidente, faltaría más.
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