hay que vivir
Menos Francomodín y más Don Juan Carlos y la Transición
Ha llegado el momento de hacer un ejercicio de militancia democrática, de que los defensores de la Transición no la demos por supuesta
Lo que Abascal quiere no es que no se acojan menas, es que se retornen
Me gusta la fruta
Franco ha vuelto. Al argumentario del Gobierno, me refiero. Esto es de primero de sanchismo. Algunos llevamos meses advirtiendo de que dentro de once meses se cumplen 50 años de la muerte del dictador y que los defensores de la Transición teníamos no una oportunidad, ... sino una obligación: defender el proceso que se abrió con su muerte. Usted qué prefiere, ¿recordar la muerte de Franco o recordar lo que sucedió dos días después: la proclamación de Don Juan Carlos? El presidente ha optado: ayer anunció que haría medio centenar de actos en torno a la figura de Franco: ¿para homenajearlo? No. ¿Para despreciarlo? Sí, pero no sólo: también para agitar el francomodín y volver a dividir a los españoles. Esto es exactamente lo contrario de lo que conviene hacer.
En once meses tendremos que elegir: ¿pisotear el espíritu de la Transición, volviendo a traer a la España de 2024 una dictadura superada, o recuperar aquel anhelo de concordia y hablar en positivo del mejor periodo de nuestra Historia?
¿Celebrar la muerte de Franco o celebrar la proclamación de Don Juan Carlos y, por extensión, la Transición? Esa es la elección a la hora de decidir qué hay que poner delante en las prioridades propagandísticas del Gobierno. De todos los gobiernos, también los autonómicos. Dice Sánchez que va a celebrar un centenar de actos para celebrar la muerte de Franco, y lo ha dicho en un acto al que fueron once ministros. Dice Isabel Díaz Ayuso que «han enloquecido», y tiene razón.
Era previsible lo que iba a hacer el Gobierno: volver a agitar la división para sacar beneficio táctico partidista. Lo que tenemos que celebrar es la proclamación de Don Juan Carlos dos días después. Fue el Rey quien heredó todo el poder y lo entregó al pueblo en tan sólo diecinueve meses: los que van desde la muerte del dictador a la celebración de las primeras elecciones el 15 de junio de 1977. Ese proceso fue capitaneado por el Monarca, que renunció al poder absoluto para entregárselo al pueblo, acompañado de Torcuato Fernández-Miranda, Adolfo Suárez, Santiago Carrillo, Felipe González y Manuel Fraga, y tras ellos el conjunto del pueblo español, que avaló con su voto el proceso democrático.
En noviembre de 2025 los periódicos empezaremos a rememorar los cincuenta años de un listado importantísimo de hitos de la Transición que nos llevará hasta 2032, con la victoria de Felipe González en 1982. Por eso, ha llegado el momento de hacer un ejercicio de militancia democrática, de que los defensores de la Transición no la demos por supuesta: debemos explicar a las nuevas generaciones que la democracia no es eterna, que conviene cuidarla y que todo empezó con la proclamación de Don Juan Carlos de Borbón ante las Cortes un 22 de noviembre de 1975. Eso es lo que hay que celebrar.