Suscribete a
ABC Premium

LA TERCERA

Navalni: morir de frío

Rusia es un país que no parece merecer a los Navalni. Por eso los matan

Un viejo libro

Triple E: empatía, energía, entusiasmo

Carbajo & Rojo

Jorge Ferrer

Aleksandr Solzhenitsyn, autor del catálogo monumental que coló ya para siempre en la memoria de Occidente el horror de los campos de Stalin, lo inicia con una anécdota tan fría como escalofriante: en los hielos perpetuos de Vorkutá un grupo de hombres ha encontrado ... un animal prehistórico congelado. Puede que se trate de un pez o de un tritón, pero los del hallazgo no son precisamente exploradores que alimenten pasiones ictiológicas. De hecho, es alimento lo que les falta, de manera que se aplican a romper el hielo a golpes, extraen la carne que lleva esperándolos ahí algunas decenas de miles de años y se la zampan a bocados. La noticia, que apareció en una revista científica esquivando la censura, revelaba a cualquiera que tuviera alguna noción de la crueldad del presidio político soviético que aquellos hombres no podían ser otra cosa que 'zeks', presos muertos de hambre. Hay, en efecto, una relación directa entre el presidio político ruso y el hambre y el frío. La inanición del 'dojodiaga', como se llamaba en la jerga concentracionaria a los que ya no daban más de sí y estaban rozándole el rostro a la muerte con las yemas de sus dedos entecos, y el frío espantoso, constante, físico y metafísico a partes iguales, en Solovki o en la propia Vorkutá. Desde los tiempos de los zares, y bien lo supieron Dostoievski o los decembristas que retaron el poder de Nicolás I, enviar a Siberia, o al norte de Rusia, fue siempre la cifra última del castigo que no te había recostado al paredón. La cárcel o el destierro a lugares distantes e inhóspitos: la gélida periferia del imperio de la que los hombres y las mujeres, si vuelven, lo hacen con marcas en el alma y la carne que ya no se les borrarán jamás.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación