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una raya en el agua

Y lo llaman progresismo

El gran éxito del sanchismo es la disciplina con que sus partidarios toleran la continua traición a los principios

Con la música a otra parte

Marina d'Or en Gaza

Ignacio Camacho

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Al nacionalismo vasco y sobre todo al catalán hay que reconocerles una posición xenófoba coherente. Durante algún tiempo prefirieron inmigrantes extranjeros a españoles –Pujol lo justificaba por criterios de adaptabilidad lingüística– pero ahora los han equiparado en rechazo al ver que en muchos barrios crece ... la disconformidad social con la proliferación de africanos. Los dos diputados autonómicos de Silvia Orriols y cierta transferencia de voto hacia Vox en algunas comarcas han encendido la luz de alarma y provocado la reclamación del control de fronteras para velar por la pureza de sangre catalana mediante el establecimiento de barreras de entrada. El sentimiento excluyente, el diferencialismo de siempre, es la cuestión de fondo que empuja al PNV y Junts a reivindicar una política migratoria propia frente al resto de España. Una nueva parcela de soberanía territorial bajo la coartada de la inquietud popular por los problemas de convivencia ciudadana.

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