editorial
PNV, el nocivo efecto de su entrega al sanchismo
No deja de perder terreno en su disputa con EH-Bildu y su influencia en la política nacional se ha visto muy mermada
El PNV está atravesando la más compleja situación que se le recuerda en los últimos tiempos. No deja de perder terreno en su disputa con EH-Bildu y su influencia en la política nacional se ha visto muy mermada. Salió huyendo de su última alianza con el PP para, durante la moción de censura a Rajoy, no 'contagiarse' de los efectos nocivos de la corrupción y ha terminado sufriendo el desgaste de estar en un bloque de partidos mayoritariamente de extrema izquierda, en las antípodas de su tradicional ideario económico y social. Le pudo lo identitario cuando sintió el aliento de los proetarras (socios como ellos de Sánchez en las Cortes) y de nada le ha valido el viraje, o mejor dicho, le ha servido para que el problema crezca. Esa indefinición ha descolocado a su electorado de siempre y terminado por provocar una crisis interna que se ha llevado por delante a Iñigo Urkullu a menos de un año de las próximas elecciones autonómicas. La entrega al sanchismo le puede terminar saliendo muy cara.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete