EDITORIAL
El que se esconde no sale en la foto
Sánchez, que ha tardado más de dos meses en volver a Valencia desde que tuviera salir corriendo de Paiporta, dice que no hay foto porque no quiere. No. No hay foto porque no se atreve a pisar la calle
Si Pedro Sánchez hubiera tenido la seguridad de que iba a ser ovacionado en los pueblos arrasados por la dana, no habría dicho ayer en Valencia que «no es el momento de la foto». Esa proclama de falsa discreción es una coartada para no asumir políticamente que tuvo que salir corriendo de Paiporta, mientras los Reyes y Carlos Mazón aguantaban la ira ciudadana, y que su respuesta política a las inundaciones ha sido un fracaso en todos los órdenes. Por supuesto que ayer y cualquiera de los días anteriores eran momentos para pisar el barro de Paiporta, Torrent y de todas las localidades que claman por una presencia del Estado que aún sigue sin producirse con la dimensión exigida por la tragedia de la dana. Siempre ha sido momento oportuno para una buena gestión, para acompañar a las víctimas y sigue siendo buen momento para dar explicaciones por la gestión del Gobierno con los cauces de ríos, arroyos y barrancos sin limpiar y sin canalizar. Sánchez dice que no hay foto porque no quiere. No. No hay foto porque no se atreve a pisar la calle.
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