bala perdida
Un tal Simón
Acabamos de ver a Simón en el anuncio de la extremaunción inminente de la mascarilla
El aval de que el coronavirus resulta ya una gripe bajo otro nombre es que ya teníamos olvidado a Fernando Simón. Ahora sí, un gripazo de poco descuido, pero gripazo, después de tres años homicidas. Simón tiene un cargo largo, director del Centro de Coordinación ... de Alertas y Emergencias Sanitarias, y fue el hombre de todos los telediarios, cuando el virus mataba en la ciudad desierta. Simón caía mal, o bien, y él lo soportaba todo con el peinado despeinado y una ronquera de imitador de sí mismo. Fue la musa macho de una época, y ahora ni le recordábamos, ya, porque tenemos la faena repartida entre Puigdemont, Sánchez y Dani Alves. Porque entre aquel 'show' de Simón, y el día de mañana, Santa Aída, nos ha ocurrido una pandemia, un volcán, una guerra, una Filomena, Luis Enrique y la ley del sí es sí. Abreviando. Acabamos de ver a Simón en el anuncio de la extremaunción inminente de la mascarilla, y casi nos ha dado un susto. Y no por la primicia de la medida sanitaria, sino por el despiste de verle a él de pronto, porque nos sonaba de algo, cuando debiera sonarnos de todo. Simón ha dicho que la mascarilla se acaba en «la semana que viene, o en la otra», fiel a su estilo de incluir dos cosas cuando toca poner nitidez sólo a una. Con Simón aprendimos a recelar del pronóstico, y hasta logramos orientarnos a propósito del futuro del virus, porque nuestro hombre resultaba insuperable dando desconcierto cuando pretendía cautela, explicando la errancia cuando buscaba el sosiego. Cuando hubo un rebrote de contagios entre jóvenes, en Mallorca, logró alguna de sus mejores frases: «Es posible que alguno fallezca». Nadie dijo tanto sin decir nada. El telediario se lo repartían, entonces, el hombre del tiempo y Simón, que era el hombre del tiempo del mal. La noticia del fin de la pandemia la ha dado sin darla, Simón, como siempre, en él, o casi siempre. Tan dura y rápida es la vida moderna que quien un día, no remoto, nos diera el parte de féretros hoy queda para foto de acertijo en los crucigramas.Y lo mismo ni eso.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete