Cabeza fría
Querido PNV: quién te vio con Rajoy, quién te ve con Sánchez
«Si se prueba lo que usted ha negado hoy, ¿estaría dispuesto a dimitir?», dijo Aitor Esteban en 2013 al expresidente popular
Funcionó todo... menos los políticos
Miguel Bosé, la DANA, y la Seguridad Nacional
Rondaba agosto de 2013. El caso Bárcenas llevaba meses siendo un escándalo político. En enero se habían filtrado los famosos 'papeles' del extesorero con la supuesta contabilidad B del PP, y en julio aquel 'sms' que Mariano Rajoy nunca debió enviar: «Luis, sé fuerte».
Los ... populares gobernaban el país con mayoría absoluta y todos los demás partidos les daban envalentonadas lecciones de ética cada día. Entre ellos el PNV, que ya tenía a Andoni Ortuzar de presidente. De hecho, el mandamás peneuvista se había puesto al mando más o menos cuando el caso Bárcenas aterrizó en política, por lo que la línea de su partido en este escándalo fue la que él marcó.
Del mismo momento es su portavoz en el Congreso, Aitor Esteban, en el cargo desde diciembre de 2012. Las ruedas de prensa, los canutazos, los corrillos pueden pecar de un carácter poco reposado, pero las intervenciones en el Parlamento, no. Hablar desde la tribuna de oradores es otra cosa. Y ahí quedan en el Diario de Sesiones para demostrarlo.
En aquel agosto de 2013, el día 1 para ser exactos, Rajoy compareció ante el Congreso forzado por la presión que existía dentro y fuera de nuestras fronteras para que explicara su relación con Bárcenas. De todos los que intervinieron aquel día, solo uno sigue en activo: el portavoz del PNV. Procede, por tanto, echar un vistazo y comparar qué decidía entonces sobre un caso de corrupción que implicaba al partido en el Gobierno, y qué dice ahora ante otro que implica al partido que gobierna, al propio Ejecutivo y a la familia del presidente.
Juzguen ustedes mismos. Ahora, perfil bajo y, a ser posible, escapar de las preguntas. En 2013, lean con detenimiento: «no sé cuantas tragaderas tienen los militantes de su partido y usted para medir cuánto se ha de resistir»; «si la investigación deduce que ha habido conductas inadecuadas o falta de ética eso sería 'per se' suficiente para que se produjeran consecuencias políticas»; «lo verdaderamente preocupante es que parece que usted, el presidente del partido, no sabía lo que pasaba»; «el superior –usted lo sabe– responde políticamente por los actos de sus subordinados»; «si se prueba lo que usted ha negado hoy, por poner solo un ejemplo la veracidad de esa contabilidad B, ¿estaría usted dispuesto a dimitir?»; «su Gobierno está tocado. Es un Gobierno con poco crédito si tiene alguno».
Y la traca final: «resistir ante la opinión pública y ante las posibles futuras revelaciones que vayan haciéndose públicas en la Audiencia Nacional. Si no sé cuánto o qué va a resistir, sí sé que harán ustedes un flaco servicio a la democracia si en vez de negar la mayor no asumen y depuran de una vez por todas sus responsabilidades. Su Gobierno será cada vez menos creíble y menos efectivo».
Querido PNV, quién te vio con Rajoy y quién te ve con Sánchez. No pareces el mismo.
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