Suscríbete a
ABC Premium

casa de fieras

Cuando no se quiere ver

Se convierten en suicidas ideológicos, en un ejército de incondicionales que estaría dispuesto a todo

Teléfonos desechables

¿Farlopero o acosador?

Alfonso J. Ussía

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Una de las cosas más fascinantes que tienen los niños es su inocencia. Cuando algo les da miedo, por ejemplo, se tapan los ojos pensando que, si no ven, nada puede verlos a ellos. Es un gesto de supervivencia, un acto reflejo que les protege ... cuando algo les asusta o conmueve. Luego uno va creciendo y todos esos brillos de pureza se van ensuciando de costumbres y comprensión. Es complicado ver a un chico de quince años tapándose los ojos pensando que así permanecerá a salvo. Pero todavía lo es más comprobar cómo personas adultas, de esas que pueden votar y todo, son capaces de ignorar lo que tienen en su entorno cuando todo apesta. Se convierten en suicidas ideológicos, una especie de ejército de incondicionales que estaría dispuesto a todo con tal de continuar la farsa.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación