Suscribete a
ABC Premium

Cambio de guardia

Tanto todo para nada

Los independentistas decidirán quién gobierna. Al precio justo

Gabriel Albiac

Esta funcionalidad es sólo para registrados

«Cuan feliz es aquel que nace bobo y todo se lo cree…»: en la sospecha de que esta vez no iban a servir de mucho los «trackings» que suplieron a las «israelitas», eludo a los augures de las ocho de la noche. Hago sonar ... en mi biblioteca los motetes de Philippe Verdelot y silabeo en ellos el texto de los poemas que, para ser cantados por la bella Bárbera Salutati, había escrito en 1526 un ya viejo Nicolás Maquiavelo. La asociación del músico francés y el canciller florentino marca una cima renacentista: la aritmética simbiosis de emoción e inteligencia. Nada mejor para borrar dos horas de desasosiego: de los virtuales sondeos a la seca contabilidad. También, para salir de ese juego de niños crédulos, «que se tragan que los asnos vuelan, / y dejan todo lo demás en el olvido, / una vez que en algo han puesto su deseo». Las encuestas son un bonito modo de dar alas imaginarias al deseo antes de que se estrelle. El sosiego de Verdelot y Maquiavelo me guía hacia el estante de la biblioteca en el cual reposa Epicuro y, en sus fragmentos, lo más alto de la sabiduría griega. Y el libro de Epicuro se despliega sobre una invitación firme a huir «de las cadenas del afán cotidiano y de la política».

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación