Suscribete a
ABC Premium

La fe de Hobsbawm

Un ejemplo de libro delerror de calarse orejeras ideológicas infalibles

Luis Ventoso

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Eric J. Hobsbawm se murió en Londres en 2012, con 95 años y aclamado como uno de los grandes historiadores del siglo XX. Hijo de judíos londinenses, tuvo una infancia errante por Alejandría, Viena y Berlín, donde de adolescente fue testigo del ascenso del nazismo. ... Huérfano temprano, en 1933 retornó a Inglaterra y con su prodigiosa cabeza acabó graduándose con honores en Cambridge. Como historiador poseía el don de una prosa límpida y muy clara, de esas que hacen sencillo lo complejo, don que adorna al intelectual de valía (desconfíen siempre de esos supuestos genios a los que no se les entiende ni jota). Además era un auténtico erudito y poseía una mirada ancha y perspicaz, capaz de relacionar hechos de manera clarividente. Como persona resultaba curioso. Comunista de fe inquebrantable y conservador en hábitos y gustos. Un forofo de la revolución condecorado por la Reina, que abominaba de la música pop y escribía en la prensa críticas de jazz rubricadas con seudónimo. Feo como un dolor, le iban los lances galantes y estuvo casado dos veces.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación