La pérdida de la infancia inspira a Pixar su próxima película
Pete Docter, director de «Inside Out», cuenta que se basó en las experiencias de su hija y en todo lo que perdió cuando cumplió doce años

A finales de mayo se conocía el contenido de la nueva película de Pixar, «Inside Out», en la que cinco emociones (Alegría, Miedo, Rabia, Asco y Tristeza, que habitan en los «Cuarteles Generales») dominan la mente de una niña de 11 años. El director de la cinta, que se estrenará en Estados Unidos el 19 de junio de 2015, es Pete Docter, quien ya puso su firma a obras como « Toy Story », « Monstruos S.A », « Wall-E » o « Up ».
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Según cuenta The Wrap , en una sesión del «Festival Internacional de Animación de Annecy», Docter disertó sobre la trama de su última cinta. Para él, la película cuenta la vida de una joven que aprende a tratar con el mundo real que la rodea, lo que provoca sentimientos encontrados en un espíritu que va creciendo. Esta joven es Riley, que sufre, junto a sus padres, el traslado a un pequeño pueblo de San Francisco. En su primer día de colegio, dos emociones, Alegría y Tristeza, pelean encanizadamente en su mente.
El brócoli y el Asco
El director propone un recorrido por los caminos que cualquiera, de niño, ha transitado, invitando así a recordar los sentimientos que se imprimieron al primer contacto con la realidad. Se trata, en el fondo, de una película sobre la pérdida de la infancia y el difícil tránsito a la edad adulta.
En el camino de la la niña, inspirada en su propia hija, «la Alegría es su primera emoción. Parece feliz en su interior, pero entonces aparece la Tristeza. Cuando Riley prueba el brócoli, aparece el Asco. Y cuando su padre la amenaza sin postre por no comerse la verdura, la Rabia entra en escena. El miedo se introduce cuando ve un cable en el suelo y pasa con cuidado por encima de él. También vemos las emociones que suscita en ella el recuerdo de los hechos que más la han impactado».
Docter dijo en este encuentro que la niña estaba en parte basada en su propia hija, Ellie, quien notó este paso de la infancia a la juventud entre los once y doce años. Pero, en el fondo, la niña en realidad es sólo el conducto para la historia que tiene lugar en su su mente, que cuenta lo que en ella hierve y es lo más interesante y universal: dejar la infancia para convertirse en un mayor.
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