AVE DEL AÑO 2014
Así se comporta una pareja de fieles golondrinas
SEO/BirdLife ha instalado una webcam en un garaje subterráneo de la Universidad Autónoma de Madrid

La golondrina común es el «Ave del Año 2014» para SEO/BirdLife . La organización de conservación decana en España ha instalado una webcam en el garaje subterráneo de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) para que quien lo desee pueda observar cómo una pareja de la especie, cuya población ha descendido un 30% en la última década en España, incuba su primera puesta de cuatro huevos.
El Grupo Local SEO-Monticola lleva más de 15 años años realizando un seguimiento de la colonia existente en los alrededores de la UAM, que cuenta con más de 100 parejas.
Además de informar a la gente sobre la suerte que tiene de que la golondrina común críe en su casa, dada la cantidad de insectos que consume, puedes llevar a cabo las siguientes sencillas medidas:
1) Conservar los nidos existentes
Las golondrinas son muy fieles a sus territorios de reproducción, vuelven año tras año al mismo lugar. Por lo que, siempre que sea posible, debes evitar retirar los nidos poco deteriorados: las golondrinas suelen reconstruirlos, reservando fuerzas para la reproducción.
2) Conservar superficies resguardadas
Las golondrinas construyen sus nidos en lugares resguardados, adheridos a superficies rugosas, por lo que conviene cuidar las estructuras salientes (aleros o voladizos).
3) Colocación de nidales
Los nidales deberán ser tipo cazoleta abierta por arriba. Se pueden colocar en el interior de edificios, establos, naves, pasillos porches, garajes o pajares, con acceso permanente desde el exterior. Es importante mantener libre de obstáculos la trayectoria de los pájaros a través de oberturas y ventanas permanentes. Las dimensiones aproximadas son: 11 x 25 x 14 cm.
SEO también anima a denunciar la destrucción de nidos en primavera.
4) Incrementar la disponibilidad de barro
para la construcción de nidos, creando, por ejemplo, pequeños barrizales en los parques de las ciudades.
5) Adecuar la obras en edificios a las fechas de reproducción de la especie.
En enero, octubre, noviembre y diciembre se puede actuar sin problemas. Nunca de marzo a agosto. Y en febrero y septiembre, aunque son épocas sensibles, se puede intervenir en caso de que fuera necesario.
MIGUEL ÁNGEL ROJAS
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