Volkswagen Passat 2.0 TDI 140 BM, «redondo»
El Passat con motorización de diésel de 140 CV, ahora con parada y arranque automáticos de motor, se mantiene con la opción más «redonda» de una gama que hace pocos meses recibía una profunda revisión. Lo hemos probado en su acabado más accesible con cambio manual, y la conclusión es clara: sigue siendo una de esas compras para acertar.
madrid Actualizado: GuardarMucho ha cambiado el Passat en los últimos tiempos, un más que digno rival de berlinas medias de segmento C que, por imagen de marca y cualidades varias, puede competir con modelos tan dispares como los generalistas Citroën C5, Peugeot 508 y Seat Exeo, o el Premium Mercedes-Benz Clase C, entre otros.
La marca germana lo sometía a una profunda puesta al día a finales de 2010, de modo que aunque no se trata de un automóvil completamente nuevo no puede negarse que lo parece. Por cierto, su semejanza con su «hermano» pequeño Jetta es más evidente que nunca. Los cambios practicados han alterado, sobre todo, la imagen exterior, con un frontal que exhibe nuevos faros (con luz diurna en los antinieblas), parrilla, capó y paragolpes, todo en línea con lo visto en los Volkswagen más recientes, y una zaga que se beneficia de pilotos, defensa y capó maletero de nuevo cuño.
También varía el dibujo de las llantas.
Dentro, las reformas son más sutiles, aunque evoluciona desde el diseño de la instrumentación hasta los detalles decorativos, la posición del freno eléctrico de parking (ahora junto al cambio y no a la izquierda del cuadro), el volante, el formato de los asientos y su tapizado... Incluso añade un reloj analógico en el centro de la consola que otorga un aspecto más prestigioso, aunque desde el puesto de conducción no se lea del todo bien.
ABC Motor ha probado en esta ocasión una de las versiones más solicitadas y sin duda «redondas»: el turbodiéselcommon rail2.0 TDI de 140 CV/320 Nm que, sin llegar a ser un «misil», mueve con soltura la tonelada y media larga que el coche fija sobre la báscula, ofrece buen reprís para adelantar con seguridad o encarar largos repechos sin necesidad de toquetear el cambio (en este caso manual de 6 marchas con un tacto técnico y directo, aunque por 900 euros más puede ser auto secuencial de doble embrague DSG, altamente recomendable), incluso a coche cargado, y exige un ajustado promedio homologado de poco más de 4 l/100 km, a nuestro juicio demasiado optimista. De todos modos, una media real de unos 6 litros ante un uso desenfadado sigue siendo muy buena. Para esto último añade un rápido sistema de parada y arranque automáticos de motor (de serie en toda la gama), para ahorrar en semáforos y otras detenciones.
Por cierto, si bien esta mecánica ganó refinamiento al adoptar en su día alimentación directacommon rail, aún se deja sentir hasta cuando se circula a buena velocidad y con el coche caliente, sobre todo acelerando. Nada escandaloso, pero sorprendente en un automóvil de porte, con una sonoridad en conjunto ligeramente superior a la de rivales como los Renault Laguna o Toyota Avensis.
El Passat no ha variado en aspectos clave, como el confort general de marcha (disfruta de suspensiones independientes bien calibradas que contienen balanceos pero filtran baches y rotos del suelo, además de una cómoda y precisa dirección que permite maniobrar en poco sitio, y unos frenos potentes y dosificables), la facilidad de conducción (apoyada en un puesto al volante muy estudiado y adaptable a toda clase de tallas y corpulencias), la habitabilidad (hasta 5 ocupantes sin mayores apuros) o el maletero (enorme).
También fija referencias en cuanto a calidad (como citábamos, capaz de acercarle a lo más selecto de la categoría sin ser despampanante) y tecnología. Sobre ésta, todo la gama integra un dispositivo que alerta al conductor sobre la necesidad de descansar, y en opción asistente por cambio involuntario de carril y aviso de obstáculo en los ángulos muertos para adelantar con seguridad, sistema de aparcamiento pilotado (en línea y batería) Park Assist... Por cierto, el equipamiento de serie de este Advance no deslumbra, pero lleva lo necesario: climatizador de doble zona, 4 elevalunas, llantas de 16 pulgadas, control de velocidad (puede ser de tipo inteligente ACC), ordenador de consumos, 6 airbag, ESP, sensores de lluvia y luces...