Volkswagen Bulli, un remake con mucho futuro

Con rasgos retro inspirados en los del legendario Volkswgen Bus (los Volkswagen T1 y T2 que poblaron las carreteras norteamericanas entre las décadas de los 50 y 70) y el también prototipo Microbus Concept Car, el concept Bulli podría anunciar un pequeño monovolumen (3,99 metros de longitud, 175 de anchura y 1,70 de altura, además de 1.450 kg de peso) que llegaría a medio plazo.

El Bulli exhibe habitáculo con disposición 3+3, apto en consecuencia para 6 pasajeros en 2 filas de asientos; el maletero puede alberga 370 litros (abatiendo todos los respaldos, salvo el del piloto, la cota sube a 1.600 litros).

La impulsión del Bulli es completamente eléctrica (con cambio automático), mediante un propulsor de 115 CV que dirige su energía a las ruedas traseras.

Según datos facilitados por VW, el Bulli logra un máximo de 140 km/h y una autonomía (en función del crucero) de hasta 300 km, además de una aceleración entre 0 y 100 km/h de 11,5 segundos, todos datos sumamente valiosos.

Carga rápida

Se sirve de una batería de iones de litio situada bajo el piso; su potencia es de 40 kWh. La idea es que la recarga completa del Bulli no exija más de una hora en surtidores especiales, lo que supondría una revolución a tenor de los tiempos que exigen los modelos eléctricos actualmente en producción, que se disparan a 8 horas. De todos modos, algunas fuentes apuestan por motorizaciones convencionales de gasolina TSI y turbodiésel common rail TDI para el Bulli que finalmente llegue a manos de los clientes.

Entre las curiosidades del Bulli, un iPad extraíble desde el que se maneja desde el sistema de audio Fender al navegador o el Bluetooth. Junto a él, en su soporte, los pulsadores de climatizador y warning, y a la derecha del salpicadero el contacto y la selección del sentido de marcha.

Además de la apreciable pintura bicolor, otro guiño clásico, calza llantas de época de 18 pulgadas, cuenta con techo panorámico, luz de marcha, intermitencia y pilotos traseros mediante LED…