Cae la tercera gran rama en Madrid en 5 días
Jaime Lissavetzky, portavoz del PSOE, pide que se acoten las zonas peligrosas

Volvió a ocurrir, y ya se acercan a la veintena los casos conocidos durante las siete últimas semanas : una gran rama se desgajó de un árbol y cayó sobre la vía pública este viernes, en la calle Villanueva (distrito de Salamanca). En su camino, afortunadamente no hirió a ninguna persona, aunque sí produjo daños en un vehículo aparcado.
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Este es el tercer caso en esta semana, tras la rama que se tronchó el lunes en la calle General Álvarez de Castro (Chamberí) –causando únicamente daños materiales– y la que cayó sobre la terraza de un local de hostelería en la calle Montera el miércoles, hiriendo de carácter leve a cinco personas.
Antes de amanecer
El suceso tuvo lugar a primera hora de la mañana –aún no había amanecido– y este hecho probablemente evitó que los daños causados fueran mayores, dado que ni había apenas transeúntes ni vehículos circulando. Una vez caída la gran rama –que se desgajó del tronco del árbol–, los vecinos avisaron a los bomberos.
Una grúa y los operarios municipales se encargaron de retirar los restos vegetales, mientras personas cercanas al propietario del vehículo –que estaba de vacaciones– presenciaban la operación. Horas después, en torno a la hora de la comida, los bomberos acudieron de nuevo a retirar otra rama en el mismo lugar.
Medidas urgentes
Las sucesivas noticias relativas a estos incidentes han causado alarma entre los madrileños, y han movido al Gobierno municipal a convocar a una comisión de expertos que analicen las posibles causas y aporten soluciones. Por su parte, el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, ha solicitado a la alcaldesa Ana Botella que se tomen medidas urgentes, como «acotar las zonas en que se sepa que puede haber peligro de caídas».
Lissavetzky ha solicitado –lo hizo en el último pleno local y lo reiteró ayer en declaraciones a ABC– un plan de gestión del arbolado. Cree que los servicios municipales, que conocen en profundidad las características y el estado de los árboles de la ciudad, deben tener datos suficientes para poder delimitar las zonas donde puede existir algún riesgo de caída.
Para el portavoz socialista, la reducción de presupuesto para el mantenimiento –que cifra en un 24 por ciento en los últimos dos mandatos–, unida al incremento de árboles plantados, «tiene que llevar apararejada necesariamente una reducción de la atención que reciben».
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