Los padres de Asunta rechazaron identificar el cuerpo de su hija en la pista de Teo

Rosario Porto y Alfonso Basterra, imputados por el asesinato de su hija Asunta, la menor de 12 años hallada muerta el pasado 22 de septiembre en una pista forestal de Teo , se negaron a ir al lugar donde se había encontrado el cadáver de la menor pese a que la Policía Judicial le corroboró que era el de su hija . Como suele ser habitual en estos casos, los agentes los reunieron a ambos para comunicarles la noticia y les plantearon la posibilidad de acompañarlos hasta la zona donde todavía estaba el cuerpo de Asunta para que éstos la identificaran.

Ambos rechazaron la propuesta, tal y como publica este domingo el El Correo Gallego. Según este diario local de Santiago, Porto habría alegado: «No puede ser mi hija, búsquenla bien» , mientras su exmarido se habría limitado a abandonar la sala para fumar un cigarrillo.

La Policía Judicial les insistió en que las características físicas de Asunta que habían descrito en la denuncia -puesta apenas tres horas antes de encontrarse el cuerpo- coincidían con el cuerpo localizado, por lo que era improbable que hubiese una equivocación . Pero aun así declinaron ir hasta Teo.

Con abogados desde el primer momento

A partir de entonces, y según informa el periódico, los padres pasaron a ser los principales sospechosos del crimen debido a su reacción, lejana a la angustia intrínseca que acarrea el hecho de perder a una hija. De hecho, el juez decidió, pocas horas después de aparecer el cuerpo de Asunta, que ambos contasen con abogados de oficio para garantizar la legalidad de los registros llevados a cabo . Un aspecto nada común pero motivado por las sospechas que tanto Porto como Basterra levantaron desde el primer momento.