Ucrania pide a EE.UU. el máximo apoyo antes de las presidenciales que puede ganar Trump

A pesar del gesto simbólico de trasladarse a la capital de Ucrania en su tercera -y probablemente última visita como secretario de Estado a Ucrania-, Austin no realizó ningún anuncio referente a las repetidas demandas de Kiev. Todo indica que las restricciones del armamento occidental de largo alcance y su empleo en la profundidad del territorio ruso se mantendrán. Austin, firme defensor Ucrania, logró configurar coaliciones con otros Estados para suministrar armas a las fuerzas de Zelenski. Pero también ha sido un conservador dentro de la Administración Biden, sobre todo respeto a la entrega del armamento más avanzado a los defensores ucranianos. El general retirado subrayó en varias ocasiones que las fuerzas de Ucrania deberían confiar y concentrarse en el uso su armamento de producción nacional.

Antes de reunirse con el mandatario ucraniano, el secretario de Defensa confesó a los periodistas que la guerra en Ucrania «es una lucha muy dura». El jefe del Pentágono subrayó que «esta lucha ha evolucionado con el tiempo y, cada vez que lo hace, hemos estado a la altura de las circunstancias para satisfacer las necesidades en el campo de batalla». La situación en el frente es, a día de hoy, desfavorable para Fuerzas de Kiev. Las tropas ocupantes acumulan avances en Donetsk a pesar del alto número de bajas que los defensores les están infligiendo. Un funcionario de defensa de Estados Unidos, bajo condición de anonimato, cifró de 600.000 las pérdidas humanas de Rusia entre heridos y muertos.

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Rosalía Sánchez | Corresponsal en Berlín

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Zelenski recibió a Lloyd Austin tras un encuentro con su ministro de Defensa; con el Comandante en Jefe, Oleksander Sirsky; y con el jefe del Estado Mayor General, Anatolii Barhilevich. Los temas tratados en la reunión con el secretario de Defensa estuvieron relacionados con el sistema de defensa aérea y con la preparación para el período invernal, además de la producción de armamento y el uso de armas de largo alcance contra objetivos rusos. «Destaqué la importancia de nuestras recientes negociaciones con el presidente Biden, durante las cuales hablamos sobre nuestro Plan de Victoria», apuntó el líder ucraniano en un mensaje publicado en las redes sociales.

El Plan de la Victoria se hizo público la semana pasada. En su discurso ante el Parlamento ucraniano, Zelenski recalcó que su estrategia era realista y su única condición era contar con el apoyo de los aliados occidentales. Sin embargo, la respuesta de los socios ha sido más bien tibia. Y el viaje de Austin ha seguido esa misma línea.

Otra de las preocupaciones que reinan en Ucrania y urgen al Ejecutivo a alcanzar compromisos con Occidente es la posible victoria de Donald Trump en las elecciones. A tenor de sus declaraciones, el expresidente podría poner fin a la ayuda militar de Washington y obligar a Ucrania a hacer dolorosas concesiones territoriales. El candidato republicano afirmó que tiene la capacidad de poner fin a la guerra mediante un «rápido acuerdo de paz», mientras Putin anuncia el incremento de su gasto militar.

En una de sus últimas declaraciones, Trump culpó a Zelenski por la invasión rusa de país. Las perspectivas para Ucrania mejoran con una eventual presidencia de la candidata demócrata, Kamala Harris, quien se ha mostrado partidaria de mantener el imprescindible apoyo de su país a Ucrania.

El Congreso seguirá ayudando a Ucrania tras las elecciones presidenciales del 5 de noviembre sin importar quien sea el inquilino de la Casa Blanca, sentencia Austin. Pero esta cuestión genera dudas en Ucrania. Fue el propio Congreso el que retrasó durante casi seis meses la aprobación de los 61.000 millones de dólares destinado al país invadido por Rusia.