Trump culpa a la contratación de «discapacitados intelectuales» del accidente aéreo
El presidente afirma que las cuotas de diversidad de la agencia de la aviación pudo tener un papel determinante: «contrataron a epilépticos y gente con enanismo»
Accidente de avión en Washington, en directo
El presidente Donald Trump convirtió lo que debía ser un mensaje de condolencias por el peor accidente aéreo en Estados Unidos desde 2001 en una dura crítica a sus predecesores, Barack Obama y Joe Biden, y un repudio feroz de las políticas de inclusión ... y diversidad. «Lo sé porque tengo sentido común, y desafortunadamente mucha gente no lo tiene», lamentó.
La comparecencia en la sala de prensa de la Casa Blanca, convocada tras la catastrófica colisión entre un avión comercial y un helicóptero militar que dejó 67 muertos, comenzó con un minuto de silencio. Sin embargo, Trump no tardó en pasar al ataque. Afirmó que, aunque la investigación oficial apenas comienza y no se han recuperado todos los cuerpos, él ya tiene una idea clara de lo sucedido.
«Cuando me fui de la Casa Blanca, la seguridad aérea estaba en su mejor nivel. Cuando Biden asumió, lo cambió todo y lo llevó a su peor nivel», aseguró. Luego, citó un artículo sobre la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) y su impulso por contratar personas con discapacidades intelectuales y psiquiátricas: «Quiero señalar varios artículos que aparecieron antes de que yo asumiera el cargo. Aquí hay uno: 'El impulso de diversidad de la FAA incluye centrarse en contratar personas con discapacidades intelectuales y psiquiátricas graves'. Eso es increíble», exclamó.
Trump no especificó si se refería a contrataciones reales o a una política de recomendaciones en el gobierno federal, ni aportó datos concretos. Sí leyó una lista de condiciones que, según él, otorgan ventajas en oposiciones para controladores aéreos: «Discapacidad auditiva, visual, ausencia de extremidades, parálisis parcial, parálisis completa, epilepsia, discapacidad intelectual severa, discapacidad psiquiátrica y enanismo, y todas califican para el puesto de controlador».
El presidente insinuó que el accidente pudo deberse a errores de los controladores aéreos, aunque no se han recuperado todos los registros de vuelo y una de las cajas negras sigue desaparecida. No obstante, reconoció después que el helicóptero militar Black Hawk volaba a baja altura y se aproximó demasiado al avión, impactándolo a pesar de los avisos de la torre de control, cuyas grabaciones han sido recuperadas.
Más tarde, Trump insistió en su acusación: «Un grupo dentro de la FAA determinó que la fuerza laboral era demasiado blanca, luego hicieron esfuerzos concertados para que la administración cambiara eso y lo hiciera de inmediato», afirmó. «Esto fue durante la administración de Obama».
Aprovechó además para anunciar el nombramiento de Chris Rocheleau como nuevo director interino de la FAA, tras la salida de Michael Whitaker el 20 de enero, el mismo día de la investidura de Trump. Rocheleau, un veterano de la Fuerza Aérea, dirigía hasta ahora la Asociación Nacional de Aviación Empresarial.
Polémica en los nombramientos
En su regreso a la Casa Blanca, Trump también destituyó al jefe de la Administración de Seguridad del Transporte (TSA), David Pekoske, a pesar de que había sido inicialmente nombrado por él mismo y luego ratificado por Biden. Además, despidió a todos los miembros del Comité Asesor de Seguridad en la Aviación, un grupo creado tras el atentado de Lockerbie en 1988 para evaluar riesgos en aeropuertos y aerolíneas, una decisión que ha generado duras críticas por parte de representantes del sector aéreo y familiares de víctimas de accidentes aéreos.
El Gobierno de Trump justificó estos cambios como parte de su estrategia para reforzar la seguridad nacional y eliminar lo que calificó como un desperdicio de recursos en el Departamento de Seguridad Nacional. No obstante, no explicó cómo se reemplazarían las funciones del comité.
Mientras tanto, la congestión del tráfico aéreo sigue siendo un problema persistente en el aeropuerto de Reagan, donde no ha habido cambios en el personal de controladores aéreos. Legisladores demócratas, como Rick Larsen y Steve Cohen, han advertido que la falta de personal en los sistemas de control aéreo podría incrementar el riesgo de nuevos accidentes.
El siniestro del miércoles se suma a una serie de incidentes en el aeropuerto de Reagan desde 2023, que ya habían generado preocupación en la industria. En mayo de 2024, un vuelo de American Airlines abortó su despegue para evitar una colisión con un jet privado, y un mes antes hubo un incidente similar entre aeronaves de Southwest Airlines y JetBlue Airways.
Trump ha aprovechado el desastre para avanzar su agenda política, señalando a sus rivales como responsables sin esperar los resultados de la investiga
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