Rusia traslada el 90% de su aviación militar lejos del alcance de los misiles ATACMS, afirma un funcionario de EE.UU.
Un informe de inteligencia de Washington concluye que los ataques ucranianos contra aeródromos rusos tendrían más éxito si Kiev utiliza sus propios drones de largo alcance
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La política restrictiva de la Administración Biden sobre el uso de los misiles ATACMS en las profundidades de Rusia no tiene visos de cambiar. A pesar de las reiteradas peticiones de Kiev, los aliados de la OTAN se resisten a levantar el veto ... que prohíbe a las fuerzas ucranianas atacar territorio ruso, lejos de la frontera, con armamento occidental. Más allá de los temores de una eventual escalada con Moscú, el empleo de los sistemas de Misiles Tácticos del Ejército (ATACMS, por sus siglas en inglés) a día de hoy no resultaría efectivo. Según una evaluación de inteligencia de Washington, Rusia ha movido hasta al 90% de su aviación militar a bases situadas fuera el alcance de estos misiles, aseguró un funcionario de Washington al rotativo The Wall Street Journal.
El Kremlin inició el traslado de sus bombarderos cuando Kiev recibió los primeros sistemas de misiles ATACMS de producción estadounidense, revela el informe. El Ejército de Zelenski los utilizó en octubre de 2023, pero era versión de alcance limitado a 160 kilómetros. Después de varias demandas de Kiev, las autoridades de Washington accedieron a suministrar proyectiles de mayor recorrido -hasta 300 kilómetros-, empleados por primera vez en abril de este año para atacar, precisamente, un aeródromo militar ruso en la Crimea ocupada por Rusia desde 2014.
Ante de las negativas occidentales, Ucrania ha estado trabajando para desarrollar su propio armamento libre de las prohibiciones. El presidente Zelenski anunció este mismo martes que su país ha probado un misil balístico de producción nacional. Otra de las innovaciones de industria de defensa de Ucrania es un «dron-misil» teledirigido de largo alcance. El «Palianytsia», (una palabra popularizada en el país invadido por la dificultad que tienen los rusoparlantes para pronunciarla y que hace referencia a un pan tradicional de Ucrania) fue utilizado por primera vez la semana pasada contra tropas rusas.
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El Ministro de Transformación Digital de Ucrania, Mykhailo Fedorov, declaró en una entrevista con AP, que el uso de esta nueva arma «será un punto de inflexión porque podremos atacar donde Rusia no lo espera hoy». Sin embargo, Fedorov no aportó más detalles sobre la distancia total que puede alcanzar el «Palianytsia». Algunos vídeos publicados por militares ucranianos sugieren que el «dron-misil» podría llegar a recorrer hasta 700 kilómetros
Kiev «tendría más éxito» si utiliza su propio armamento de largo alcance en el interior del territorio ruso, defiende el funcionario anónimo de EE.UU. en sus declaraciones a WSJ. El informe de inteligencia salta a la palestra después de dos días de ataques combinados rusos que dañaron significativamente las capacidades de generación de energía de Ucrania. Sin duda, el uso de armamento de producción nacional contra bases militares rusas facilita la posición de Washington y del resto de aliados en esta cuestión.
«Líneas rojas»
Después del último ataque masivo contra la infraestructura energética y demás objetivos civiles el pasado lunes, el mandatario ucraniano reiteró la necesidad de obtener los permisos necesarios para golpear al enemigo en su propio territorio. Zelenski alega que estas prohibiciones dan una ventaja importante al invasor. Moscú lanzó el 26 de agosto más de cien misiles de distintos tipos junto a un centenar de drones en uno de los mayores bombardeos desde el inicio de la guerra a gran escala. Gran parte de los proyectiles se dispararon desde bombarderos rusos.
«Cada uno de estos ataques nos recuerda una y otra vez la necesidad crítica de contar con capacidades de largo alcance… Esta es la táctica antiterrorista óptima que todos nuestros socios, de quienes esperamos decisiones sobre nuestras capacidades de largo alcance, emplearían con todo derecho y, sin duda, utilizarían para protegerse», destacó el líder del país en guerra en un mensaje en sus redes sociales. Además, Zelenski recalcó la importancia de aumentar las defensas aéreas del país para poder abatir drones y otros proyectiles. Según los cálculos del jefe de Estado, para blindar lo cielos ucranianos se requieren al menos 25 sistemas Patriot.
Las diversas líneas rojas autoimpuestas por los aliados respecto a Ucrania se fueron diluyendo a medida que el conflicto se desarrollaba. A principios del 2023 los países occidentales debatían el envío de tanques, que finalmente, y tras meses de retrasos, llegaron a manos de los defensores.
Los ataques en el interior del territorio de Rusia con las armas suministrados por la OTAN se resisten todavía. Y en esta cuestión es la Administración Biden la que está sosteniendo una posición más conservadora frente a otros países que apostarían por una política más flexible. Reino Unido apoya la idea de que sus misiles Storm Shadow alcancen objetivos dentro de Rusia, pero el primer ministro británico, Keir Starmer, opta por «un enfoque consultivo». Starmer que no «quiere provocar un escándalo». Londres pretende evitar así el deterioro de las relaciones con Washington y opta por no dar los correspondientes permisos hasta que la decisión sea consensuada, señala el medio inglés The Telegraph.
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