Los países bálticos boicotean la reunión de la OSCE
Lavrov pisa por primera vez un país de la OTAN desde la invasión de Ucrania
Alemania quiere convertirse en la columna vertebral de la Defensa europea

Estonia, Letonia y Lituania se han unido Ucrania y han anunciado su boicot a la reunión que esta semana celebrará la OSCE en Macedonia del Norte, debido a la presencia del ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, que por primera vez desde la invasión rusa de Ucrania pisará un país de la OTAN. La asistencia de Lavrov, «amenaza con legitimar» a Rusia como «miembro pleno» de un foro de países libres, han explicado en un comunicado.
El ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Dmitró Kuleba, había hecho pública anteriormente esa misma postura: «Es una presencia de coerción y socava a la OSCE mediante el abuso de la regla del consenso». Se refería al veto ruso sin justificación para asuntos organizativos y «asuntos clave», como el rechazo a la candidatura de Estonia para ocupar la presidencia rotatoria.
Kuleba ha mencionado también la detención por parte de Rusia de tres empleados de la OSCE en el este de Ucrania, con más de 500 días bajo arresto. «En estas condiciones, la presencia de la delegación rusa y la reunión de un nivel ministerial por primera vez desde el comienzo de la invasión rusa a gran escala de Ucrania no hará más que agravar la crisis que Rusia ha creado en la OSCE», ha expuesto Kuleba.
Sin presidencia designada
Lo cierto es que el veto ruso amenaza con una situación que no tiene precedentes en la historia de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, que puede quedar un año sin una presidencia válidamente designada. Este caso no está previsto en los estatutos del organismo con sede en Viena en el que están representados los 57 estados participantes en la organización de seguridad regional más grande del mundo. A pocos días de que Macedonia del Norte concluya su presidencia, se ha llegado a un acuerdo para que presida Malta en 2024, país que, a diferencia de Estonia, no pertenece a la OTAN y agrada más a Moscú. Sólo falta la decisión formal y se espera que surja durante la reunión de dos días en Skopje.
Para acudir a la votación, Lavrov debe obtener los permisos de sobrevuelo necesarios. Las sanciones de la UE prevén expresamente tales excepciones para las reuniones de la OSCE y Bulgaria ya ha hecho público el suyo.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, también viajará a Skopje para «reafirmar el firme compromiso de Estados Unidos» con la OSCE y sus valores, dándose así la posibilidad de que los dos ministros de Exteriores puedan hablar personalmente, aunque no está prevista una reunión bilateral formal y la parte estadounidense ha dejado claro que no habrá «ningún trato» con la delegación rusa. El embajador estadounidense en la OSCE ha declarado que «nadie recibirá al ministro Lavrov con los brazos abiertos«.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete