Orbán reconoce que Europa no puede financiar sola la guerra en Ucrania tras haber bloqueado los fondos europeos en varias ocasiones

«Los estadounidenses abandonarán esta guerra, en primer lugar no la alentarán», ha afirmado Orbán. «Europa no puede financiarla sola... algunos todavía quieren seguir enviando enormes cantidades de dinero a esta guerra perdida, pero el número de los que permanecen en silencio... y los que expresan con cautela que debemos adaptarnos a la nueva situación, está aumentando».

Sin embargo, Orbán ha bloqueado u obstaculizado en reiteradas ocasiones la aprobación de paquetes de ayuda de origen europeo hacia Ucrania. Con ello, se ha erigido como uno de los caballos de Troya afines a Putin dentro de la Unión Europea, además de que Hungría ostenta hasta final de año la presidencia rotatoria del Consejo de la UE.

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Por otro lado, Europa carece de efectivos militares y capacidades de defensa suficientes para protegerse ante ataques exteriores, a pesar del aumento del gasto tras la invasión rusa de Ucrania, ha señalado un estudio de un instituto británico, según recoge AFP.

La victoria de Donald Trump en los comicios presidenciales Estados Unidos ha propagado las inquietudes en los líderes europeos entre los que se preguntan si el magnate republicano cumplirá su palabra de acabar la guerra en Ucrania y de qué manera o, por el contrario, si mantendrá el apoyo militar a Ucrania y permitirá a Europa reforzar sus capacidades de defensa.

Las principales fuerzas armadas europeas «siguen infradotadas de personal, muchas continúan perdiendo tropas sin incentivar suficientemente a las generaciones jóvenes a implicarse», indica el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS). «Continúan apoyándose en Estados Unidos en distintos grados en todos los campos militares», añade.

Si bien «los miembros europeos de la OTAN incrementaron su gasto en un 50%» desde la anexión de Crimea por parte de Rusia en 2014, la invasión de Ucrania en 2022 dejó al desnudo numerosas debilidades de la capacidad europea de garantizar su propia seguridad. El arsenal «se ha reducido severamente desde el fin de la Guerra Fría» y «la industria de defensa en Europa también se ha contraído», sentencia el estudio.

Asmismo, para el presidente electo Donald Trump, el gasto en defensa de la mayoría de los países que componen la OTAN es insuficiente: «Muchos países de la OTAN, a los que se supone que debemos defender, no sólo no han cumplido con su compromiso actual del 2% (que es bajo), sino que además llevan muchos años en mora en pagos que no han realizado. ¿Reembolsarán a Estados Unidos?», publicó el magnate en la red social X.

No obstante, el estudio apunta que la producción armamentística ha aumentado considerablemente desde 2022. Los sectores como la defensa aérea y la artillería han incrementado considerablemente su fabricación dado que deben satisfacer las necesidades de Ucrania. Además, la mitad de los pedidos de material militar de los países europeos de la OTAN se dirige a empresas del continente, contra un 34% a proveedores estadounidenses.

El pasado miércoles, el nuevo comisario europeo de Defensa, Andrius Kubilius, declaró que la Unión Europea debe gastar más en este sector, no por la reelección de Trump, sino por la amenaza rusa. También, durante la actual cumbre de dirigentes europeos en Budapest, el presidente francés, Emmanuel Macron, ha dicho que la UE no debe «delegar para la eternidad» su seguridad a Washington. Macron fue el primero en dejar abierta la posibilidad de enviar tropas europeas a Ucrania: «Si los rusos rompen las líneas del frente, si hay una petición ucraniana (...) tendríamos que plantearnos legítimamente la pregunta», algo que rechazaron tajantemente el resto de dirigentes.