Leonid Volkov, opositor ruso y aliado de Navalni, atacado con un martillo y gas lacrimógeno en Lituania

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Ángel Gómez Fuentes

Volkov era compañero y confidente de Alexei Navalny, recietnemente fallecido en cautiverio ruso. A día de hoy es una de las figuras más reconocibles de la oposición rusa. Fue su jefe de gabinete y dirigió la fundación anticorrupción fundada por el crítico del Kremlin hasta 2023. Recientemente, advirtió contra las mentiras de Putin y la propaganda estatal de Moscú en el caso Navalni.

«Si la noticia de la muerte de Navalni es cierta, entonces Navalny no sólo murió, sino que el presidente ruso Vladimir Putin lo mató», escribió tras su fallecimiento. El año pasado recibió el premio Theodor Heuss, por «asumir grandes riesgos contra las mentiras estatales y las campañas de desinformación en Rusia». Volkov fue llevado anoche de urgencia a un hospital para ser atendido de sus heridas. «Estamos en casa. Leonid tiene el brazo roto y todavía no puede caminar«, publicó después en X su esposa, Anna Biriukova.

Un portavoz de la policía lituana, Ramunas Matonis, informó que «muchos policías están trabajando en el lugar de los hechos» y adelantó que podría ofrecer más detalles a lo largo del miércoles. «Trabajaremos y no nos rendiremos», ha garatnizado hoy Volkov en un video posterior a la paliza y publicado en resdes, en el que también celebra «seguir con vida».

Reconoce haber sido víctima de un ataque «típico» por parte de los secuaces del presidente ruso Vladimir Putin. Tiene un brazo roto y fue golpeado en la pierna «unas 15 veces» durante el ataque frente a su casa. «De algún modo la pierna está bien. Me duele al caminar», resume el diagnóstico.

Como miembro de la OTAN y de la Unión Europea, Lituania acoge a muchos exiliados rusos y ha apoyado firmemente a Ucrania desde el inicio de la invasión de Rusia. El Ministro de Asuntos Exteriores de Lituania, Gabrielius Landsbergis, ha descrito por su parte el ataque como «impactante».

«Los perpetradores tendrán que rendir cuentas por sus crímenes», ha advertido, tras calificar las noticias sobre la agresión como «estremecedoras». Los partidarios de Navalny han difundido en Internet fotografías que muestan sus heridas y demuestran que ha quedado con un ojo morado y sangre en la pierna, que se filtraba a través de sus pantalones.

El ataque tuvo lugar a las 22:00 horas del martes a la puerta de su casa, cuya ubicación no ha sido hecha pública a pesar de que deberá ser trasladado hoy mismo a otro domicilio.

Todavía no ha sido identificado ningúnsospechoso, pero el modus operandi no se corresponde con el de los agentes rusos, que suelen optar por los tiros en la cabeza o los envenenamientos. Volkov ha dejado claro que no se dejará amedrentar por esta agresión y que continuará su labor política desde el exilio. Horas antes de su agresión, el opositor había admitido al medio ruso independiente Meduza que estaba inquieto por su seguridad desde la muerte de Alexéi Navalni.

«El principal riesgo ahora es que nos maten a todos. Eso es bastante obvio», dijo. Como otros aliados de Navalni, Volkov se exilió en 2019, tras la apertura por parte de las autoridades rusas de una investigación criminal contra la fundación anticorrupción que había fundado. Desde 2021, Moscú investiga a Volkov por su papel en la organización de manifestaciones contra el Kremlin. Tras la muerte de Navalny, Volkov pidió a sus partidarios que «no se desanimen, porque es lo que él espera de nosotros ahora».