Tensión en Bolivia: Evo Morales denuncia un ataque armado, pero le acusan de «autoatentado»

Morales ahora denuncia que el presidente de Bolivia ordenó su detención y «eliminar a Evo» y por eso fue perseguido por cuatro efectivos encapuchados y vestidos de negro, que portaban armas de fuego.

El presidente boliviano Luis Arce instruyó «una inmediata y minuciosa» investigación ante la denuncia. Más temprano el viceministro de Seguridad Ciudadana explicó que no hay ninguna orden de detención contra Evo Morales, se está indagando el presunto ataque y que hay un «criterio de un posible caso de autoatentado».

El caso deriva de una acusación contra el expresidente de Bolivia, Evo Morales, por los delitos de estupro, trata y tráfico de menores. Él es investigado por tener una relación y un hijo con una adolescente de 15 años el año 2016, los padres de la víctima, presuntamente consintieron la relación a cambio de beneficios y favores políticos.

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Evo Morales dice que no es «tonto» para entregarse y rechaza declarar por el caso de trata de menores

Ronald Catari | Corresponsal en La Paz

La Fiscalia le citó a declarar el día 10 y el expresidente no acudió; desde entonces se espera que dicte una orden de detención, que no se ha producido ante las amenazas de bloqueos de sus seguidores

Evo Morales se rehúsa a declarar, afirmó que no es «tonto» para entregarse y desde entonces se resguarda en la región cocalera del departamento de Cochabamba. Mientras sus seguidores insisten en que se trata de una «persecución política» para evitar que sea candidato en las elecciones presidenciales del 2025.

«Intentan minimizar este hecho asegurando que fue un montaje (…) el primer vehículo sufrió cuatro disparos y el segundo, al que luego nos trasladamos, catorce o más», respondió Morales a quienes dudan del ataque que sufrió la mañana del domingo. En el video que publicó se ve además al chófer que lo trasladaba herido de la cabeza y se resiste a dejar de conducir.

Sus allegados han salido también a dar declaraciones: exigen una investigación y que se proteja a Evo Morales. El exministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, solicitó que misiones de la comunidad internacional lo lleven a un «lugar seguro», mientras que el exministro de Gobierno, Carlos Romero, advirtió que «en Bolivia se pueden vivir jornadas muy duras».

Esto en un contexto en el que los seguidores de Evo Morales mantienen más de una decena de puntos de bloqueo en carreteras que conectan el oriente con el occidente boliviano, donde el departamento de Cochabamba es el más afectado. Se van a cumplir dos semanas de la movilización que exige que se anule la investigación de trata y tráfico de menores contra su líder político.

Los bloqueos han provocado más de 1.193 millones de dólares de perdida, de acuerdo a datos de las autoridades, y ha agravado la crisis económica que atraviesa el país latinoamericano. El desabastecimiento de combustible, la ausencia de moneda extrajera y de algunos productos de primera necesidad se ha incrementado.

En los últimos días, la policía intervino algunos de estos puntos de conflicto y dispersó a los bloqueadores, sin embargo, ellos respondieron con dinamitas. El alto mando militar fue sustituido y el comandante de las fuerzas armadas declaró que realizarán tareas en los puntos de bloqueo.

Evo Morales y Luis Arce pertenecen al Movimiento al Socialismo y están confrontados des hace varios meses por manejar el partido político y se disputan la candidatura del próximo año.