Cuba excarcela al líder de la disidencia, José Daniel Ferrer García

Ortega recibió una llamada de la prisión de Mar Verde, en Santiago de Cuba, en la noche del miércoles para notificarle que debía presentarse este jueves en el penal. Una vez allí, le comunicaron la noticia de la liberación.

El líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) fue encarcelado en Santiago de Cuba el 11 de julio de 2021 (11J) en el contexto de las masivas protestas antigubernamentales. Meses más tarde, le fue revocada una sentencia de cuatro años que cumplía en prisión domiciliaria, las autoridades ordenaron que terminara por extinguirla tras las rejas. No obstante, la Seguridad del Estado lo ha amenazado con prolongarle la condena.

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Camila Acosta | Corresponsal en La Habana

Este miércoles comenzaron a ser liberados, con condiciones, algunos de los 553 presos que saldrán de las prisiones cubanas tras el acuerdo alcanzado por la Administración Biden y La Habana

Con 54 años de edad, Ferrer García cumple su segunda prisión política. Estuvo entre el grupo de los 75 prisioneros de la llamada Primavera Negra de Cuba, cuando fueron detenidos activistas de derechos humanos y periodistas independientes, condenados posteriormente hasta a 27 años de prisión. El líder de la disidencia cumpliría 8 años de una sentencia de 25, fue liberado bajo «licencia extrapenal» tras mediación de la Iglesia Católica y el Gobierno de España.

En noviembre del pasado año, trascendió que Ferrer había sido brutalmente golpeado en prisión por los guardias y trasladado a un hospital. En una ocasión anterior, sus carceleros también le pegaron delante de su hijo, de apenas 5 años.

En los últimos tres años y medio ha recibido ataques sónicos y envenenamiento químico desconocido, ha sido expuesto a altas temperaturas y desorientación en celdas sin ventanas ni ventilación, iluminadas 24 horas por una potente luz artificial que, además de provocarle afectaciones en su visión, le dificulta conciliar el sueño, según ha denunciado la ONG Prisoners Defenders (PD). Asimismo, ha recibido alimentos en estado de descomposición y ha sido obligado a vestir en ropa interior.

Por tales motivos, PD ha alertado que Ferrer estaba siendo asesinado paulatina y lentamente: «Su vida e integridad física, psicológica y cognitiva corren grave peligro».

Sin especificar que se trataría de presos políticos, el régimen cubano anunció este martes la liberación de 553 prisioneros «sancionados por delitos diversos». La declaración oficial de la Cancillería indicó que se produce «como parte de las estrechas y fluidas relaciones con el Estado Vaticano» y en consonancia con una «práctica que es común» en su sistema de Justicia y que «ha caracterizado la trayectoria humanitaria de la Revolución».

Menos de 24 horas más tarde, comenzaron las salidas. Los presos políticos han sido liberados, pero no bajo amnistía ni indulto, sino por medio de «libertad condicional», «excarcelación anticipada» o «licencia extrapenal». Esto supone que persisten amenazas de prisión sobre ellos.

Hasta el momento, han sido excarcelados alrededor de 31 presos, según el Observatorio Cubano de Derechos Humanos. Todos son manifestantes del 11 y 12 de julio de 2021 (11J) y, en su mayoría, estaban próximos a extinguir sus condenas. Las autoridades refirieron que el proceso se haría de forma gradual.

Aunque muchas familias están a la expectativa de verse beneficiados, la cifra no representa ni la mitad del monto total de prisioneros por motivos políticos en la isla (1161, según Prisoners Defenders).

Las excarcelaciones suceden tras una negociación con la administración de Joe Biden en la que medió El Vaticano. Este martes, poco antes de anunciarlas, el Gobierno estadounidense informó de la suspensión del Título III de la Ley de Libertad y Solidaridad Democrática Cubanas (Ley Helms-Burton) y sacó a Cuba de la lista que de Estados patrocinadores del terrorismo.

Un alto funcionario comunicó igualmente que la decisión de la Administración Biden se habría producido tras una promesa del régimen de La Habana a la Iglesia Católica de liberar a los presos políticos.