El Constitucional rumano exige un nuevo recuento en la primera vuelta de las presidenciales

El comunicado emitido se refiere también al hecho de que la plataforma TikTok ha favorecido a un candidato presidencial frente al resto. El CSAT considera que TikTok no cumplió con las normas de la campaña electoral, porque permitió a Georgescu ingresar materiales que no estaban marcados como electorales en la campaña. La sentencia considera también que la visibilidad de Georgescu aumentó significativamente en comparación con los demás candidatos debido a criterios de contenido establecidos por el algoritmo TikTok. En definitiva, la red social TikTok, al no implementar los requisitos legales establecidos por ella autoridad electoral BEC, no respetó las normas jurídicas que regulan el desarrollo del proceso electoral, incidiendo en su resultado final.

La representante de la Fundación Konrad Adenauer en Bucarest, Katja Plate, informó por teléfono que Georgescu no solo difundió teorías de conspiración en el pasado, como las de que la bebida con cafeína Pepsicola contiene microchips, y que defendió opiniones no científicas sobre la cura del cáncer. También ha mostrado reiteradamente simpatía por el ideólogo nacionalista ruso Alexander Dugin, que influyó fuertemente en Vladímir Putin.

La máxima instancia judicial rumana había recibido además dos solicitudes presentadas por candidatos perdedores y por varias ONG para declarar nula la votación, en las que se alega que Georgescu no ha informado como exige la ley sobre las fuentes financieras de su campaña electoral y se sugiere la posibilidad de que haya recibido una financiación procedente de Rusia que podría suponer una injerencia extranjera en las elecciones soberanas rumanas.

Georgescu había dicho a la autoridad electoral central que había llevado a cabo su campaña con recursos financieros «cero». Esta segunda decisión ha sido pospuesta por el Tribunal al menos hasta este viernes, en la sesión en la que los jueces han vuelto a ser convocados. Esta vez se centrarán en el examen de la información proporcionada por varias autoridades, con el fin de comprobar si hay indicios de financiación ilegal. Algunos medios rumanos informas sobre conexiones de Călin Georgescu y el grupo Mazăre de Constanza y de una relación cercana con el empresario condenado por corrupción junto con Radu Mazăre, Sorin Strutinsky.

También publican pruebas de que un confidente del oligarca moldavo Vladimir Plahotniuc, buscado por fraude electoral, lavado de dinero y fraude fiscal entre otras cosas, viajó a Rumanía después de las elecciones presidenciales en Moldavia para supervisar personalmente la campaña de Georgescu.

El Consejo Supremo de la Defensa Nacional solicitó este jueves a las autoridades con competencias en el ámbito de la seguridad nacional, a las que tienen competencias en el buen desarrollo del proceso electoral, así como a los órganos de investigación criminal, que adopten urgentemente las medidas necesarias para aplicar esta sentencia y que, de aquí en adelante, las investigaciones sean iniciadas por estas instituciones, dado que el Consejo Supremo de la Defensa Nacional no tiene competencias relacionadas con la conducción del proceso electoral.

Representantes de las autoridades con funciones en el ámbito de la defensa, el orden público y la seguridad nacional han presentado primeras evaluaciones sobre los posibles riesgos para la seguridad nacional, «generados por las acciones de algunos ciberactores estatales y no estatales sobre algunas infraestructuras, soporte para el proceso electoral». La sentencia reconoce que Rumania, junto con otros Estados del flanco oriental de la OTAN, se ha convertido en una prioridad para las acciones hostiles de algunos actores, especialmente la Federación Rusa, y que hay un interés creciente en influir en la agenda pública de la sociedad rumana y en la cohesión social del país.

«La primera vuelta de las elecciones presidenciales podría ser cancelada, las cosas pueden salir muy mal«, advertió este jueves Augustin Zegrean, expresidente del Tribunal Constitucional, que considera que la decisión judicial de volver a contar los votos de la primera vuelta podría conducir fácilmente otra exmiembro del Constitucional, Cristi Danileț.

Los rumanos están convocados a votar tres domingos consecutivos. La primera de las votaciones fue la del pasado 24 de noviembre, la primera vuelta de las presidenciales. El próximo domingo, 1 de diciembre, se celebran elecciones parlamentarias y, una semana después, está prevista la segunda vuelta de las presidenciales. Este calendario electoral, de momento se mantiene. El sorprendente resultado del pasado domingo, así como la decisión de Constitucional, podría influir en las dos próximas votaciones. Si se anulase el resultado de Georgescu, que quedó primero en la primera vuelta con el 22,94% de los votos, la política liberal conservadora Elena Lasconi, con el 19,17%, pasaría a ser la más votada.