La conexión del narco ecuatoriano con los cárteles de Sinaloa y Jalisco abre otro frente entre EE.UU. y México
Catorce de los 22 grupos criminales señalados por Daniel Noboa están vinculados con esas organizaciones criminales mexicanas
Identificar los tatuajes de las bandas criminales, clave en los controles militares en Ecuador
Mauricio Caterva, el periodista que ataca a los narcos y que algunos apuntan como el objetivo del asalto a la televisión en Ecuador
La guerra abierta entre el Gobierno de Ecuador y los grupos criminales que estalló el pasado lunes llega hasta México y agrega tensión a la relación de este país con Estados Unidos en materia de seguridad. Según informó la Policía de Ecuador, 14 de ... los 22 grupos criminales a los que el presidente Daniel Noboa acusa de querer desestabilizar al país tienen vinculación con los dos principales cárteles de la droga mexicanos, el de Sinaloa y el de Jalisco Nueva Generación.
Se trata a su vez de organizaciones en la mira del Gobierno de Joe Biden, especialmente el cártel de Sinaloa, que según la Casa Blanca juega un papel crucial en el tráfico de fentanilo que el año pasado se cobró más de 100.000 vidas en Estados Unidos. Este fue el tema que abordaron en su reunión del pasado mes de noviembre en San Francisco Biden y Andrés Manuel López Obrador.
El caos ecuatoriano es sensible para México porque Washington ha prometido colaborar con Noboa y, en una situación de guerra interna como la que se vive en el país sudamericano, vuelve a cobrar fuerza la posibilidad de que Estados Unidos declare a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas. Una definición que habilita al Pentágono y a las agencias de seguridad estadounidenses a realizar maniobras en el extranjero sin que se requiera el visto bueno del país en cuestión.
Un tema complejo si se considera que en la retórica de López Obrador es un lugar común la acusación a la DEA de presunta injerencia en México. En paralelo, buena parte de los aspirantes a la candidatura presidencial del Partido Republicano se han manifestado a favor de realizar operaciones militares en México contra los cárteles. La crisis de Ecuador, un país cuya moneda de curso corriente es el dólar, sirve como plataforma para estas ideas.
La asociación de lo que acontece en Quito y Guayaquil con México es ineludible. José Adolfo Macías Villamizar, alias «Fito», que escapó de una prisión ecuatoriana el fin de semana previo al caos, sería, según el Gobierno de Noboa, el principal enlace del cártel de Sinaloa. Por otra parte, Fabricio Colón, otro de los protagonistas del conflicto, sería el hombre del Cártel Jalisco Nueva Generación.
Plataforma marítima
En Ciudad de México hay información concreta sobre la irrupción de los cárteles en Ecuador. Según comenta una fuente del Gobierno de López Obrador a ABC, bajo condición de anonimato, este proceso se precipitó durante la gestión de Rafael Correa, concretamente cuando a partir de 2007 el exmandatario habilitó que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) pudieran instalar campamentos en territorio ecuatoriano. Era la época de la máxima tensión entre el presidente colombiano Álvaro Uribe y los grupos armados en el país cafetero.
En el Gobierno mexicano creen que las FARC funcionaron de vehículo para que el cártel de Sinaloa comenzara a operar en Ecuador ya que replicaron allí una relación que ya se había generado en territorio colombiano. Con ese trasfondo generaron una relación con el grupo ecuatoriano Los Choneros. El Ejecutivo de Noboa sostiene que los narcos aprovechan la plataforma marítima de su para así para organizar el trasiego de su producto con destino a Norteamérica.

Rutas de la cocaína a través de Ecuador
Ruta del Pacífico
Ruta de la Sierra
Ruta amazónica
Acopio y salida
COLOMBIA
Quito
ECUADOR
Guayaquil
PERÚ
Fuente: Policía Nacional Ecuador
ABC

Rutas de la cocaína a través de Ecuador
Ruta del Pacífico
COLOMBIA
Ruta de la Sierra
Ruta amazónica
Carchi
Esmeraldas
Imbarura
Pichincha
Sucumbios
Quito
Napo
Manta
Cotopaxi
Los
Rois
Pastaza
Bolivar
Guayas
Chimborazo
Santa Elena
ECUADOR
Canar
Guayaquil
Acopio y salida
de la droga
PERÚ
Fuente: Policía Nacional Ecuador
ABC
El cártel de Jalisco Nueva Generación, en tanto, desembarcó en Ecuador durante la gestión de Lenín Moreno, entre 2017 y 2021. En esos años se vinculó al grupo conocido como Los Lobos, con quienes comenzaron a realizar tareas de entrenamiento.
El segundo momento crucial habría sido durante el Gobierno de Guillermo Lasso ente 2021 y 2023. Fue durante esa administración cuando los cárteles comenzaron a controlar las prisiones ecuatorianas que más tarde servirían de base para la organización de diversos delitos.
En marzo del año pasado el Informe Mundial sobre la Cocaína que elabora la Organización de las Naciones Unidas señala que los dos cárteles mexicanos se han vuelto factores de desestabilización en Latinoamérica. En tanto, Anne Milgram, titular de la DEA, dijo en 2023 que entre Sinaloa y Jalisco Nueva Generación tienen aproximadamente 44.000 empleados esparcidos en todo el mundo.
Asesinato de Villavicencio
En agosto del año pasado el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio también fue atribuido a grupos criminales asociados con los cárteles de la droga. Cuando la prensa cuestionó a López Obrador en su conferencia matutina, este simplemente minimizó el hecho: «Son solo hipótesis».
Por otra parte, ayer evitó ahondar en los acontecimientos de las últimas horas. «Expresamos nuestra solidaridad al pueblo de Ecuador, a su Gobierno, reprobamos estas actitudes vandálicas, la violencia, el querer imponerse con el uso de la fuerza. No estamos de acuerdo con eso», expresó el mandatario.
Pero el rol de los cárteles mexicanos en el Pacífico sudamericano es cada vez más ineludible. En Colombia, Gustavo Petro tiene identificadas las operaciones del grupo de Sinaloa en diversas regiones de su país y considera a esta organización un obstáculo para sus metas de la llamada 'paz total', con la que el presidente de izquierda intenta definir la estrategia de seguridad.
En Perú se especula sobre una situación similar, al punto de que en el Gobierno mexicano existe la tesis de que el narco jugó un papel en la desestabilización del Gobierno de Pedro Castillo, que luego terminaría encarcelado.
Ecuador funciona además como combustible a la retórica de la oposición a López Obrador, especialmente para cuestionar su política de «abrazos, no balazos» que busca evitar un choque frontal con el narcotráfico para preservar a la población civil. En esta lógica, Correa, Moreno y Lasso fueron permisivos con el crimen organizado y por eso ahora Ecuador está en guerra.
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